miércoles, 2 de diciembre de 2009

Cimientos

Si no desarrollas tus alas, terminas echando raíces.

Cuando miramos y admiramos los edificios, sólo nos fijamos en lo que nuestros ojos logran ver, y ese conjunto visual es que el determina si es bello o práctico. Sin embargo, es difícil que nos paremos a pensar cada vez que nos fijamos en uno de ellos, como se han construido los cimientos donde reposan y el esfuerzo que ello ha supuesto.

Creo que también a las personas nos pasa algo similar. Solemos crecer en función de lo que logramos sentir y nos vamos adaptando poco a poco a los cambios que nos llegan desde fuera, pero difícilmente podremos renunciar a nuestros cimientos.

Ya de pequeños, hemos sido educados en un determinado ambiente, con una determinada cultura y en un determinado entorno y familia. Cuando salimos a la vida, ya solos y sin la cobertura de nuestros padres, aun de forma inconsciente, solemos mantener aquello que hemos aprendido como soporte básico de nuestra vida, como esos cimientos que nos pueden dar la seguridad que necesitamos.

Poco a poco, esos cimientos, a medida que maduramos, van tomando cuerpo cierto y vamos siendo más conscientes del por qué somos así y no de otra manera, y poco a poco, vamos siendo más conscientes de que podemos escoger entre lo que siempre ha estado ahí, y lo que nos vamos encontrando en el camino de la vida.

Ideas, muchas ideas son intercambiadas frecuentemente, pero… ¿y las personas??? Eso cuesta más y en lugar de cambiar, creo que las personas forman parte integrante e inamovible de nuestros propios cimientos. Hay personas que pese a que están a nuestro lado mucho tiempo en la vida, en realidad no forman parte de nuestra vida, pero otras, se cruzan en nuestro camino durante unas cuantas horas, y ya somos incapaces de olvidarlas. Vivir en una persona es formar parte de sus cimientos, es transmitir parte de las ideas propias, de las esperanzas, de los sueños, del futuro, por breve que este sea, de la persona que nos acepta y nos permite colocarnos dentro de su vida, formando parte de sus cimientos.

Podemos cambiar nuestros cimientos, pero a medida que crecemos, como si fuésemos también un edificio al que no le preocupa ya la belleza de su fachada, nos encargamos más de asentar los cimientos y los reforzamos con piezas escogidas que siempre, pase lo que pase, serán personas que formen parte de nosotros mismos… para siempre.


domingo, 22 de noviembre de 2009

Cartas

Hola cariño, ¿cómo estás???

Poco más de tres meses desde que comenzamos con el proyecto de la casa… desde el emplazamiento, justo a caballo entre el mar y la montaña, en mitad de todo para disfrutar de todo… ¿cómo se llama el lugar??? Tampoco importa mucho

Poco más de dos meses de tu embarazo… una sorpresa… una auténtica sorpresa, lo reconozco… a estas alturas de mi vida, ya no esperaba volver a tener que comenzar desde el momento cero, pero mira por donde, ahí está y según va pasando el tiempo, me va gustando más la idea…

Cuantas cosas en tan poco tiempo… la casa nacida alrededor de la chimenea, que se asienta en el centro de la estancia principal para que marque un ritmo calmado a las tardes y las noches que podremos apreciar tras los altos ventanales que prácticamente han sustituido a las paredes e incluso el techo, con sus amplios espacios transparentes, nos permitirá ver las estrellas en la noche y los amaneceres tempranos… Lo que ignoraba era lo del piano… deberías haberme avisado que tocas el piano. No lo sabía, pero me agrada la idea, aunque hay que repararlo. Ajado por el paso del tiempo y deteriorado por la carcoma, habrá que desmontarlo, repararlo, limpiarlo y volverlo a montar… no me importa en absoluto ya que siempre me han gustado esas cosas, pero no podré afinarlo, así que cuando esté todo listo, habrá que llamar a alguien…

De todas formas, hay mucho que hacer todavía, así que podremos ir cambiando algunas cosas, más estéticas que prácticas, ya que las instalaciones principales no podremos cambiarlas para no retrasar la entrega… Por cierto, no pondremos el huertecillo justo tras la casa como pensaba, si no que si te parece bien, lo prolongaremos un poco, alejándolo de esta para que los niños no lo estropeen… seguro que les gustará corretear por fuera en los días de sol, así que he visto un lugar a unos 200 metros que me parece bueno y además, podremos colocar un pequeño invernadero para aprovecharlo mejor.

Lo que no tengo muy claro es lo de la piscina… pero de momento, vamos a dejarlo tal y como comentábamos en su día… aunque me gustaría cambiar algunas cosas… ya lo miraremos con calma

Confío que por ahí todo esté bien y que el trabajo te deje algo de tiempo para pensar en mi, en nosotros, en cómo va creciendo todo esto y en que tardemos mucho tiempo en terminarlo, seguro que el niño o niña que ha de venir, será feliz cuando pueda corretear por las afueras de la casa al sol o cuando esté lloviendo, que mire como el monte rezuma vida, o bien, como el mar se embravece y se viste de arrogante espuma

Sí, estos últimos meses han sido de locura, han sido un cúmulo de sorpresas, una tras otra, y no siempre todas han sido buenas, ¿verdad??? Es lo que tiene la vida, que los momentos buenos se acaban con los malos y estos, a su vez, con los buenos… son ciclos que nos acompañan en nuestra existencia y que nos aportan alegrías en los momentos buenos y esperanzas en los demás… habrá que seguir así hasta que encontremos una mejor forma de hacerlo, ¿no te parece???

Te echo de menos… echo de menos tu sonrisa… Tal vez fue esa sonrisa lo que me enamoró… esa forma de afrontar la vida, esa frescura y sencillez… tal vez me enamoré de un sueño hace mucho tiempo y un día ese sueño se hizo realidad.

Hasta pronto


jueves, 19 de noviembre de 2009

Cambios

Cuantas veces al día me veo reflejado en un espejo??? No sabría decirlo, pero varias veces sin duda alguna, y siempre veo, prácticamente la misma imagen…. Pero cuando comparo mi imagen con otras anteriores más antiguas de fotografías, me doy cuenta que he cambiado, que soy distinto…

Supongo que es algo tan común que nadie le da importancia y aunque no nos guste, no tenemos más remedio que aceptarlo por mucho que se empeñen algunas clínicas de belleza.

Pero el cambiar por fuera, es el menor de los cambios, y mirando esas mismas fotografías, donde me veo más joven, me doy cuenta de que también yo he cambiado… de que todos hemos cambiado, y en algunos años, la mayoría de nosotros optamos por cosas distintas de las que teníamos otrora y que hoy, no nos gustan… y cambiamos de trabajo, de casa, de ropa, de actividades, de pareja… cambiamos incluso de vida… y vamos dejando atrás el mayo del 68 que abandonamos por caduco, la conquista de la Luna por innecesaria, el Windows 95 por obsoleto, el efecto 2000 por patético…

Vamos dejando atrás ideas y olvidando a aquellos que en el pasado se esforzaron por facilitarnos la vida, aunque no lo consiguiesen… cuantos héroes han quedado relegados en los libros de historia y sus gestas enterradas por otras nuevas, aunque sean de ficción… hoy es fácil encontrar a personas que no sabrían confirmar si algunos personajes han sido reales o son de ficción… Hoy en día, es mucho más popular Frodo que Rescenvinto y sin ningún género de dudas la vida de aquel es mucho más conocida que la de este último

Sí, he cambiado… tal vez he crecido y ahora doy importancia a las cosas pequeñas cuando he descubierto que el mundo no puede ser conquistado, si no sólo disfrutado… tal vez he madurado y he descubierto que las palabras sin los hechos, no conducen a nada y que todo cuanto me rodea es todo cuanto siempre he tenido…

Me estoy haciendo conformista??? Es posible que muchos lo vean así, pero yo siempre pensaré que estoy cambiando, que sigo cambiando cada día, aunque día a día sea incapaz de percibir ese cambio en mi imagen reflejada en el espejo…


lunes, 16 de noviembre de 2009

Continúo...

Cuanto tiempo sin poder atender esta bitácora… y qué pocas cosas que hay que contar…

La vida, esa extraña sensación que nos invade desde que asomamos al mundo hasta que nos vamos de él, se muestra, la mayoría de las veces, tan parsimoniosa y ajena a nuestros deseos, que difícilmente estos se cruzan con la línea de la realidad… Tal vez por eso, hemos de aprovechar la intensidad de estar en el momento adecuado, en el lugar preciso y con la gente apropiada… Nuestro trabajo, nuestra familia, nuestros amigos, nuestros amores, e incluso nuestra fortuna… Supongo que a la mayoría de nosotros nos gustaría disponer de más de lo que nos agrada y de menos de lo que sentimos como obligación.

La distribución del tiempo es así… tan relativa como opuesta entre personas… cuando deseamos estar en un sitio, realizando alguna cosa concreta o cerca de una persona determinada, no siempre se puede y entonces la vida, al ritmo de ese tiempo que no sabe lo que es retroceder, se encarga de darnos, no alternativas, si no más bien, esas otras opciones obligadas de las que es casi imposible escabullirse…

Mas, sigo vivo… y no, no sigo vivo por que respire, si no que sigo vivo por me palpita el corazón… Todo este tiempo, complicado, difícil, escaso siempre y casi siempre dedicado a los demás, no ha sido baldío… no es baldío… pero sigue siendo un tiempo que no es el mío

No puedo si no dar las gracias a todos aquellos que están a mi lado, que me acompañan, que me ayudan, me apoyan, me consuelan y que sabiendo que su situación tampoco es sencilla, siempre me regalan una sonrisa…

Por muy complicado que sea el camino, la mayoría de las veces alguien se nos adelantó y nos lo puso más fácil… tal vez tendiendo un puente.


domingo, 4 de octubre de 2009

Cronos

Hasta el más dulce de los azúcares, mejora con una pizca de sal

Hace un par de días, comentaba con una buena amiga que las musas de los artistas, suelen ser más fecundas cuando la nostalgia está presente. Tal vez sea así y por ello, cuando somos felices, solemos dejar un poco de lado ese canto de añoranza de los tiempos donde las sonrisas eran protagonistas y que solemos almacenar con sumo cuidado en las estanterías de nuestra memoria.

El viejo dios Cronos sigue siendo exigente y el tiempo, mi tiempo, me es exigido como tributo por aquellos a quienes quiero y necesito… su necesidad por un lado… la mía propia por otro… una extraña mezcla donde se ve mezclado un poco de todo pero donde, ahora, me siento feliz. Compartir el tiempo no es lo más importante, si no compartir la vida por que la vida no es el tiempo que pasamos aquí, si no los momentos que disfrutamos de nuestra estancia… La vida seguirá siendo un viaje y no un destino, y por ello, cuando el acompañante de tu viaje te sonríe, te ayuda, te apoya, te quiere…, hace que el viaje merezca la pena, hace que la vida sea una vida…

El tiempo que a mí me falta me es devuelto con creces por el cariño de aquellos que me quieren y aquellos a los que quiero… así de sencilla es mi vida, y algunas veces, así de maravillosa.

jueves, 17 de septiembre de 2009

Setas

Para ver, hay que mirar

Tras un largo, caluroso y seco verano, las primeras lluvias de finales de septiembre implantaron un otoño de forma brusca. En realidad, el otoño era tan deseado como necesario para que las vidas volviesen a ese orden de la rutina que las vacaciones suele romper e incluso olvidar.

En los primeros días de octubre, cuando las nubes y el sol juegan entre si y permiten que la luz penetre hasta la superficie de la tierra, los hongos y las setas, comienzan a hacer su aparición en los campos y los micólogos aficionados o muy entendidos, se lanzan a la búsqueda de exquisitos especímenes al paladar y provechosos beneficios para el bolsillo... pero no así ellos dos... ellos, sólo buscaban un día de tranquilidad, disfrutar de un largo paseo campestre y de los paisajes otoñales que el entorno les regalaba siempre... las setas era una mera excusa para abandonar sus eternos quehaceres y engañarse a sí mismos de que era lo correcto, en lugar de convencerse de que era necesario...

El día, poco a poco fue cambiando su soleado rostro y pronto las nubes tiñeron de gris plomizo todos los poros de las nubes por donde antes se colaba un juguetón y cálido sol... la lluvia comenzó a caer, fina primero pero insistente y con más fuerza a medida que el tiempo avanzaba y ellos no tuvieron más opción que intentar buscar un refugio donde protegerse del intenso aguacero que en pocos minutos, ya les había empapado hasta los huesos.

La tosca cabaña estaba bastante deteriorada y sucia, pero tenía un techo donde podrían cobijarse hasta que la tormenta amainase y pudiesen regresar... sus ropas empapadas y el fresco viento que se colaba por las rendijas, les hicieron sentirse desagradablemente incómodos con ellas y con algunos trastos viejos que allí había, encendieron un reconfortante fuego que les alivió tenuemente de esa molesta sensación. Una manta muy deteriorada, les ayudó a ahuyentar el frío y al final, entre pequeños un ligero tiritar, terminaron abrazándose... hasta ese momento, tan sólo habían sido amigos...

Qué lastima... no cogieron ninguna seta.


lunes, 14 de septiembre de 2009

Comienzos

La vida es mucho más que esperar a la muerte

Es curioso como la mayoría de los días, comienzas de forma anodina y la aventura de pasar las horas del trabajo o de ocio, por muchas expectativas que tengamos, no nos aportan, en realidad, muchas cosas novedosas y menos aún, alegrías.

Pero de vez en cuando, sin saber por qué, sin entender el cómo, hay excepciones donde desde la primera hora, todo es distinto y todo el ambiente nos nutre el alma de paz y nos convierte en seres más felices.

Encontrar en la calle gente que sonríe, personas que dan las gracias, que piden las cosas por favor, que cuidan los detalles tan simple como no entorpecer el paso, como no empujar cuando las prisas agobian, o cuando alguien nos dice que nos desea buenos días, sabiendo que es sincero y no sólo educado, hace que todo pueda comenzar con ese ambiente positivo que se impregna en nuestra vida y es capaz de anular todas esas sensaciones aburridas que solemos encontrar tan frecuentemente…

Hay días que la vida, por unas palabras, por unas sonrisas, por saber que hay alguien ahí, simplemente, merece la pena ser vivida… hay días en que el dar gracias a las personas que queremos y recordarles lo importantes que son en nuestra vida…

Hoy, algo ha pasado que no tal vez no tiene importancia… pero el día ha sido radiante…

lunes, 7 de septiembre de 2009

Ladrones

Si hasta la vida perdemos, tal vez lo único nuestro realmente sean los sueños…

Ladrones... devolvedme la cordura que en cada noche estrellada me arrancaís del mundo de los sueños para hacerme despertar... devolvedme la ilusión que guardo en cada uno de mis recuerdos para sentir la esperanza de que todo puede ser igual... devolvedme la imagen de una sonrisa que se perdió entre la cortina salada de mis lágrimas... devolvedme los ecos de suaves de las palabras cargadas de cariño que son cantadas al oído cuando la soledad medra entre mis desdichas.... devolvedme el sabor de los besos infinitos regalados al alba de cada día con el mejor de los deseos.... devolvedme el palpitar nervioso de la hora de un encuentro tras eternas e impacientes esperas... devolvedme la excitación de sentir las caricias que hacen estremecer más mi alma que mi piel... devolvedme el brillo de unos ojos que me guían como un faro cuando yo miraba perdido sin saber donde ir... ladrones... quedaos si lo deseais con mi vida, pero… devolvedme mis sueños...

domingo, 6 de septiembre de 2009

Jardin

La riqueza no consiste en poseer mucho, si no en disfrutar lo que se posee

El aroma del limonero aún desparrama su fragancia entre los rayos de sol que, a última hora de la tarde, juegan a colarse entre sus hojas frescas, y se proyectan como puntos de luz en el suelo de un suave jardín donde una pareja, en esa sombra entrevelada, descansa, habla y sueña con amapolas blancas y su inimitable aroma…

Pronto llegará el otoño…


miércoles, 26 de agosto de 2009

Tren

No solemos conseguir todo lo que queremos, pero sí queremos todo lo que conseguimos.

Llegaba con el tiempo justo a la estación de trenes… El viaje en tren, por muy modernos que estos fueran, siempre son especiales, pues siempre me traen a la memoria aquellos viajes de antaño, en la misma estación, donde la gente llegaba con maletas de cartón atadas con cuerdas y repletas más de ilusión y sueños que de de cualquier otra cosa… o cuando regresaban, con la misma maleta, prácticamente vacía y con algo de decepción y dolor… un punto de inflexión en la historia de tantas y tantas personas…

El viaje en tren, nunca ha dejado de ser mágico… horarios rígidos en la partida y no tanto en la llegada… paisajes que se mueven tras las ventanillas… horas de incomodidad en un asiento rígido… compañeros silenciosos e indiferentes… No, antes los compañeros no eran así… conversaban, compartían lo mucho o lo poco que guardaban en el equipaje… prácticamente todo… pero lo demás, casi no ha variado.

Compré el billete y recorrí los andenes buscando mi tren… la hora se acercaba y el tren, saldría, como siempre, puntual… busqué el andén… el tiempo de la partida estaba rozando ya el segundero… corrí…

El tren estaba montado y los motores provocaban un cierto temblar en toda la estructura del largo convoy… desde fuera, se podía ver a los pasajeros que se asomaban a las ventanillas como en un último intento de recordar dónde estaban… cómo si la despedida no fuese con las personas si no de mucho más….

Por fin encontré mi vagón… entré un tanto precipitadamente empujado por la prisa y comencé a mirar, al igual que el resto, por las ventanillas… todo lo que me era conocido, quedaría atrás…

Me senté en mi asiento y cerré los ojos para descansar… alguien me preguntó: “¿Dónde se dirige???”. No pude por menos que sonreír… “al mismo sitio que usted… a vivir”

sábado, 22 de agosto de 2009

Tatuaje

Nunca llueve encima de las nubes

Se habían amado con la intensidad de la juventud y con la calma de la experiencia… llevaban mucho tiempo juntos y cada vez era un auténtico descubrimiento

Sus cuerpos, cansados, sudorosos y satisfechos, yacían desnudos sobre las sábanas arrugadas que intentaban mantener el pudor de cubrir el colchón. Él se fijó una vez más en el tatuaje de ella que conocía en profundidad. Arrancaba desde su pecho izquierdo, rodeando con una suave línea el pezón que aún seguía erecto y orgulloso, aunque fuese pequeño. Subía ligeramente y bajaba entre los senos descubriendo serpenteantes giros por su estómago hasta desparecer por sus ingles, aunque sabía perfectamente que continuaba por la nalga derecha y dando extraños giros iba a terminar en una compleja espiral en el centro de su espalda.

El tatuaje era un conjunto de variopintas marcas, líneas, figuras que difícilmente podrían catalogarse de geométricas pese a la sincronía que manifestaban, otras que se asimilaban a ornamentos florales, elementos clásicos, tal vez basados en arte griego, y todo ello rematado con diminutas cabezas de animales fantásticos…

Hace tiempo le preguntó qué era todo aquel loco amasijo de figuras aparentemente colocadas sin sentido y que habían ido cogiendo forma en su piel… “mi vida” contestó ella… No insistió, pero le fascinaba pasar sus dedos por los contornos de aquel tatuaje. A él le excitaba recorrer una y otra vez la piel marcada con aquellos dibujos, símbolos y líneas que no comprendía… no era la sensación de acariciar su cuerpo, si no de acariciar “su vida” lo que le producía aquel extraño estado de euforia y excitación… a ella le gustaba sentir los dedos acariciar su piel, como si remarcara más aún esos dibujos… el placer que sentía cuando los dedos acariciaban de forma casi etérea su piel, o cuando apretaban como si quisiese que la tinta entrase más dentro aún… le satisfacía que él recorriera, sin preguntar, “su vida”

“Mañana iré al tatuador”
“Entonces… ¿hemos terminado???”
“Sí. Mi vida debe seguir, no quiero que se detenga”

miércoles, 19 de agosto de 2009

Cena

En la base de la más alta montaña, siempre encontraremos un pequeño grano de arena.

La noche caía lentamente y el cielo nacarado se dejaba conquistar por la oscuridad. Ella llegó a casa cansada y con un fuerte dolor de cabeza. El día había sido duro y largo y el trabajo le había dejado un cansancio intenso, como pasaba casi a diario durante las últimas semanas. En su mente, sólo quedaban los restos de los últimos problemas que, a su pesar, aún se tenía que llevar a casa por que las horas del día se hacían cortas, y en sus sueños, llegar pronto, quitarse los zapatos, darse un tibio baño y dormir el máximo de horas que fuese posible.

Él la esperaba dentro… ya había acostado al niño y había preparado la cena, e incluso había adornado la mesa con flores y velas para que aquella velada fuese especial. Sabía del esfuerzo de ella en el trabajo y a pesar de que muchas veces era incapaz de entenderla, sabía que ella era sí… decidida, tenaz, impetuosa, responsable, dulce… y hermosa, muy hermosa…

Bajó la intensidad de la luz y puso algo de suave música de orquesta que anulase el lejano zumbido de la ciudad.

Ella, sorprendida por la presentación, le preguntó qué es lo que ocurría, si estaban celebrando algo especial y el, dándole un suave beso en los labios, le susurró al oído: “sí… que te quiero mucho”. Ambos se fundieron en un abrazo…

martes, 18 de agosto de 2009

Albatros

El héroe no lo es por que vence a los dragones, si no a su propio miedo.

Fue hace ya tiempo, en la época en que las sirenas aún visitaban las playas y los dragones no habían sucumbido a los caballeros.

El albatros se sentía seguro en las rocas del acantilado donde difícilmente llegarían sus depredadores. Desde allí le gustaba contemplar los atardeceres donde, ya con el apetito saciado y presto a descansar, se sentía feliz.

Una noche de luna llena, advirtió en una playa cercana algo que le llamó la atención y no pudiendo resistir la tentación, voló en la oscuridad hasta la playa, y allí descubrió, para su sorpresa, a una sirena llorando.

Intrigado, sorprendido y enternecido por sus lágrimas, le preguntó por qué lloraba, y ella le contestó que por que su condición de sirena, no se sentía libre, pues por mucho que lo intentase, no podía ver la todas las maravillas que había en la tierra… El albatros, incapaz de verla llorar, comenzó a describirle cada uno de los parajes que había ido sobrevolando todos los días, y mientras, la sirena le contaba cómo eran los rincones más bellos del fondo del mar y esas otras playas que ella conocía y que estaban llenas de tesoros que esos extraños humanos eran incapaces de valorar.

Cada noche, durante años, el albatros y la sirena se encontraban en la playa y se contaban lo que habían visto… y luego contaban las estrellas, o los granos de arena de la playa o las gotas de agua que hay en el mar… día tras día, hasta el amanecer que la sirena volvía a las profundidades y ambos se complementaban de tal forma que parecía que, pese a lo que hoy podemos pensar que es inimaginable, era como si ambos fuesen sólo uno que lo tenía todo de los dos.

Un día, el albatros acudió a la playa pero esta estaba desierta. Esperó y esperó hasta el amanecer, pero la sirena no acudió. Noche tras noche, el albatros volvía a la playa sin saber por que la sirena no llegaba… le preguntó a las estrellas, a los granos de arena de la playa, a las gotas de agua del mar, a los pececillos que dejaron de temerle, a las orgullosas gaviotas… hasta que una noche, la espuma de las olas le comentaron que la habían visto en otra playa, pero en la oscuridad, no sabían en cual.

Desde entonces, el albatros surca las orillas de los mares desde lo alto, mirando cada uno de los rincones de las playas esperando, sin conseguirlo, encontrar a la sirena… a su sirena.

Mediciones

El lobo sólo hace lo que debe, es el hombre quien dice que no es bueno lo que hace.

Todos sabemos más o menos lo que representa un metro, un kilo, o una hora… el hombre se empeña en querer medir todo para poder hacerse una idea de su importancia en el universo… hablamos de grandes o pequeñas distancias, de grandes o pequeños volúmenes y de grandes o minúsculos espacios de tiempo… pero cómo medimos al hombre???

Naturalmente no me estoy refiriendo a su tamaño que camba en función de cada persona… altos, bajos, gruesos, delgados… cada persona… un mundo… sí… Cómo se medirán los sentimientos de cada persona??? cuánto odio puede tener una persona??? cuánto amor puede dar una persona??? cuanta amistad contiene una persona??? No sabría decirlo… para eso no encuentro referencias y no creo que nadie pueda hacer una aproximación… tan sólo puedo hacerme una idea de lo que yo siento, y aún así, es posible que difiera mucho (y no digo en más o en menos) de lo que puedan sentir los demás.

Al igual que me pregunto si el mismo tono que yo veo el azul del cielo con mis ojos, lo pueden percibir los demás exactamente igual… o si la música que yo escucho a los demás les suena exactamente igual… No, no lo creo… seguro que hay minúsculos matices de color o timbre que les hace distintos…

De igual forma, el odio, la envida, la amistad, el amor… todo tiene un valor distinto en cada persona… y el dolor, ese maldito dolor que nos ocasiona la pérdida de alguien a quien queremos, tampoco se puede medir… Hay quienes ante una infidelidad, rompen sistemáticamente una pareja, y hay quien la perdona… e incluso hay quien mira hacia otro lado y calla… pero está claro que todos, en mayor o menor medida, sufren… ¿Cuánto sufre cada uno??? mucho, estoy completamente seguro que mucho… tal vez todo cuanto puedan, pero es posible que no por igual…

Hoy, en esta noche de canícula e insomnio, sólo la soledad me acompaña y busco en los rincones, una vez más, los recuerdos de un pasado caduco y obsoleto… aquel pasado donde conocía a las personas… sí, conocerlas desde dentro hacía afuera… conocer sus inquietudes, sus secretos, sus tristezas, sus alegrías… No he sabido medirlas y hoy, no sé cuan de grandes o pequeños son sus sentimientos… sólo tengo la referencia de los míos… pocos ya sin duda… muertos muchos en crueles y absurdas batallas por intentar recuperar un terreno que fue cedido, que fue arrebatado, que fue abandonado, que fue conquistado y ahora ondean extraños pabellones... pérdidas que no muchas veces no sé si fueron tales, por que sólo se pierde lo que se tuvo, y a las personas... no, a las personas, no se las tiene... sólo están ahí o no lo están, sólo eso...

Corazones con coraza y almas opacas… no son compañeros de viaje que deseo… tal vez por ello hoy camino solo… no, solo no… la soledad me acompaña y me dicta al oído estas palabras mientras secretas lágrimas recorren mi alma por el dolor de la pérdida…

Me quedaran, como siempre, mis imborrables recuerdos, sonidos de risas, brillos de ojos, abrazos intensos… sólo recuerdos de tiempos distintos, mejores, sin duda… hasta que el dolor desaparezca y el alma se serene… hasta que las lágrimas cesen y nuevamente encuentre un motivo para sonreír…

Sí, el lobo, al fin y al cabo hace lo que debe hacer… es el hombre quien se empeña una y otra vez en decir lo que está bien y lo que está mal… tal vez sea el hombre quien esté equivocado.


sábado, 15 de agosto de 2009

Amantes

La victoria suele ser efímera, la derrota, permanente.

Tras tiempo de ausencias, el encuentro de nuevo… como siempre, las miradas produjeron sonrisas de felicidad y los abrazos paliaron en lo posible, la ausencia de otros gestos afectivos que el tiempo les había privado de mantener

Tras un breve camino en la ciudad intercambiando la información de lo que en este último tiempo les había ocurrido, llegaron pronto al lugar donde podrían, ya en la intimidad, amarse como deseaban…

Los labios besaban, acariciaban, rozaban otros labios, evitando palabras que no eran necesarias… se habían dicho infinidad de veces que se querían, y ahora no era necesario, ya que ambos lo estaban demostrando… la lengua se alimentaba de otro aliento y buscaba en la boca del otro, el amor que se desprendía desde el alma y que en aquel momento, era el mejor y más necesario de los alimentos… las caricias descubrían una y otra vez, todos los recovecos de una piel que por otro lado, se dejaba hacer con más que complacencia, como si la piel estuviese desapareciendo para que en lugar de esta se pudiese llegar directamente hasta el corazón…

El tiempo se detuvo ante el empuje del amor, de la pasión, de una felicidad necesaria, vital… el tiempo se detuvo cuando la vida pudo dejar de lado todas las adversidades que habían sufrido y ahora, ellos, hombre y mujer, protagonistas único del universo, se amaban sin control, deseando que aquel momento no tuviese final ninguno…

Se amaron con un frenesí de necesidad, durante todo el tiempo que estuvieron juntos… el mundo desapareció ante sus ojos y sólo podían verse el uno al otro… los cuerpos se hicieron casi transparentes y las almas retomaron el juego amoroso sin pudor ninguno, convirtiéndose en casi una sola cosa…

El fin de semana acabó… debían volver a sus cotidianas y aburridas rutinas… retomar sus vidas en un mundo que no les correspondía y que les había situado en el lugar equivocado… Silencios, besos, sonrisas, lágrimas… El momento de la despedida era así… cruel… como asesinar a un ser inocente que sólo deseaba ser feliz…

“Hasta siempre mi amor” se dijeron… ambos sabían que en realidad era como decir un “hasta nunca”

lunes, 10 de agosto de 2009

Obediencia

Quien hace suyas las ideas ajenas, podría quedarse sin las propias.

Las casualidades, como siempre, me han traído el recuerdo de una arenga que escuché hace algunos años en un trabajo: “Un mensaje a García”.

A aquellos que se dediquen a leer el texto del enlace anterior, no le será difícil identificarse con mucha parte del mismo, y lo más probable es que aplaudan su rotunda lógica, por que creo sinceramente, que la tiene.

Estoy convencido de que el texto se escribió con el ánimo de ser una historia ejemplar de lo que debe hacerse en algunas situaciones, pero por otro lado, ignoro si ese texto ha de ser generalizado para trasladarse a todo ámbito.

Cuando conocí el texto, se exponía como ejemplo en el mundo laboral. El viejo axioma de “El jefe siempre tiene razón”. No, no voy a cuestionar que las decisiones de la dirección deben comprenderse para tener que cumplirlas, de echo, muchas de ellas son desconocidas para muchos y por lo tanto, han de ser asumidas como tales.

Pero el gran problema, es cuando esas teorías intentan conducir nuestra vida y básicamente en la política, que es donde se diseñan los puntos vitales de la sociedad en que nos ha tocado vivir , y se quieren llevar a cabo, así como en ese otro mundo más interior y profundo que son nuestras creencias y que se nutren de religiones y que guian nuestros pasos en pos de algo que se supone mejor. Incluso ese otro mundo más cerrado y cercano de los amigos, la familia, la pareja…

Sí, cuantos de nosotros no ha recibido nuestro particular encargo de ese tipo y sin cuestionárnoslo, hemos intentado cumplirlo. No digo (quede claro) que no deba ser así, pero me pregunto qué pasaría si nos cuestionásemos más lo que escuchamos y fuésemos un poco más críticos con las ideas que pregonan nuestros políticos, muchas de ellas ya fuera de lugar, o esas otras en las que se apoyan las religiones, muchas de ellas obsoletas, o esas que nos dicta nuestro jefe, muchas de ellas por desconocimiento del avance de la sociedad en general, o esas que nos hacen nuestros amigos o familiares muchas de ellas estúpidas y que aceptamos para no causar dolor innecesario y que no rebatimos.


sábado, 8 de agosto de 2009

Conversación

La vida son sensaciones, sólo eso.

Hacía varios meses que no se veían, y a pesar de que habían tenido una continua comunicación, a ambos les apetecía fundirse en un abrazo. ¿Cuánto tiempo hacía que se conocían??? Ninguno lo sabía ni tampoco importa mucho. Siempre, era la mejor definición.

Ella estaba alterada y nerviosa. Se sentía radiante y feliz y no hacía más que hablar de lo feliz que era con él. Le gustaba recrearse en lo que hacían juntos en todo cuanto compartían y en como su vida había mejorado desde que se encontraron.

Él, sonriente, asentía con calma y miraba ese brillo en sus ojos que delataba que ella estaba profundamente enamorada. También él lo estaba de ella…

Hablaron durante horas, se rieron, se abrazaron, y el tiempo pasó en un suspiro. Llegó la hora de la despedida y ella le dio un tierno beso en la mejilla. Su amor la estaba esperando ya fuera.

Sí… desde siempre fueron los mejores amigos.

viernes, 7 de agosto de 2009

Velocidad

No podemos escapar al futuro, pero si intentar construirlo.

Tras algo más de 15 minutos de intenso tráfico en la ciudad, llegó a las afueras y pronto enfiló hacia la autopista con la agilidad que el tráfico le permitía

No habían pasado más de 10 minutos cuando por fin enfiló la salida y llegó al peaje… insertó la tarjeta y la barrera se abrió sin problemas. En ese momento, respiró profundamente y comenzó su camino

En unos pocos minutos alcanzó poco más de 240 kilómetros por hora y sentía, por primera vez, la excitación y el vértigo de la velocidad en su cuerpo… la adrenalina le desbordaba y la emoción de sentirse, tal vez por primera vez en su vida, poderoso, le hacían pedir más a un coche que ya estaba dando todo lo que podía.

No había obstáculos y el coche respondía con la precisión que se le exigía. Los adelantamientos raudos y seguros, sólo provocaban gritos e insultos de los otros conductores, y más de una cara de susto, pero él sabía que es lo que estaba haciendo.

En alguna ocasión, el coche parecía querer detenerse en algún repecho, pero pronto se nivelaba el firme y la aguja del velocímetro, temblaba intentando llegar más allá del tope que el motor le marcaba

Tan sólo 12 minutos más tarde y encontró el cartel: “Viaducto de las Torrillas". Longitud: 1.746 metros”. Conocía perfectamente la autopista, puesto que solía recorrerla dos o tres veces al mes y conocía perfectamente la suave pero constante curva a la izquierda que el puente mantenía con un inadecuado peralte para altas velocidades.

Sujetó el volante con fuerza y todo su cuerpo se puso rígido como si formase parte del entramado metálico del vehículo. Sin reducir su velocidad, el coche enfiló por el inicio del puente y cuando la autopista comenzaba la curva, él gritó, aceleró todo lo que pudo y mantuvo el volante rígido.

El golpe rompió el pretil de protección y el vehículo salió volando para caer unos 70 metros más abajo.

miércoles, 5 de agosto de 2009

Escribir

Todo es importante, pero no todo tiene importancia

Por esas casualidades de la vida, hoy ha llegado a mis manos un periódico del año 1957. No he podido resistir la tentación de ojearlo y pese a que las noticias de aquel día no tienen nada que ver con las de hoy, así como la forma de relatarlas, pues las noticias se comentaban con un cierto entusiasmo, o al menos, eso me ha parecido entender por lo que poco que he leído, he disfrutado con esa extraña sensación de alejarme en el tiempo, más atrás incluso del momento de mi nacimiento...

Pero sí que me ha resultado curioso el tipo de letra empleado. Comparándolo con la tipografía informatizada de hoy en día, donde con pocos movimientos del "ratón" cambiamos formas, tamaños, colores, etc., las noticias de hace 52 años se hacían con los antiguos tipos (de plomo seguramente) en los que se tenían que encajar las palabras en las líneas y formaban ese entramado casi artesanal y donde no es difícil encontrar algunos fallos mecánicos si observamos las alturas y distancias de las letras.

Cuando era niño, y por que los ordenadores eran tan desconocidos para el gran público como los chanchullos de los políticos hoy en día, yo soñaba con tener una máquina de escribir Hispano Olivetti, de esas con amplia curvatura y donde había que hacer ejercicios con los dedos para coger la suficiente fuerza para aporrear las teclas, y aún así, se corría el riesgo de que la nitidez de la escritura no fuese todo lo buena que se necesitase, ya que los que colocaban los muelles del retorno, sabían muy bien hacer su trabajo.

Jamás pude tener una y cuando ya fui algo más mayorcito, tuve que conformarme con una Olympia compacta que aún está guardada en algún sitio… Reconozco que apenas la usé y todas aquellos proyectos de geniales estudios de larga verborrea, se quedaron ahí, justo en proyectos huecos y vacíos, colocados al lado de la Olympia por si alguna vez me decido a escribirlos, aunque hoy mis dedos carecen de la fuerza y la agilidad necesaria para poder usar la máquina de escribir convencional.

No sé por qué escribo esto… tal vez por que mi imaginación infantil aún sueña que estas palabras son escritas con aquél esfuerzo, buscando esos huecos en un texto que no admite correcciones, y es que esa forma de escribir era mucho más similar a la vida en sí… no había copiar ni pegar, no había salvar, y si se cometía un error, quedaba reflejado en las palabras, y sólo aquellos textos que eran buenos, podían salir a la luz y pasar, tal vez, a esos tipos de plomo con se iban formando las planchas de los tabloides para que todo el mundo pudiese conocer la opinión de quien había redactado la noticia…

Escribir… hablar en silencio para todo el que desee escuchar… voces que el viento no se puede llevar… escribir… ese placer oculto de, algunas veces, poder vomitar lo que llevamos dentro, vistiéndolo a nuestro antojo para que el amor no sea visto… para que la venganza parezca justicia… para que el dolor muera tras una sonrisa… Escribir… hablar con calma y sosiego, pensar en voz alta, tachar, emborronar, empezar y nunca terminar… no importa lo que se dice, no importa cómo se dice, pues es un todo que algunos afortunados saben moldear para poner pasión en sus escritos, en sus historias… escribir es poner una voz en el silencio para que tú, lector, puedas oírme aunque yo nada tenga que decirte.

martes, 4 de agosto de 2009

El pasado siempre queda atrás, pero se queda a la distancia suficiente para no perderlo de vista

Tal vez el mejor momento del día, es aquel donde el amanecer inunda de anaranjados los paisajes que se cubren con sombras infinitas, asegurándonos posiblemente un plácido día...

Tal vez el mejor momento del día, es aquel donde sol, en el cenit, nos inunda de calor y nos regala una sensación de pereza que se consolida en una intensa conversación al compás de una comida...

Tal vez el mejor momento del día, es cuando la lluvia asoma tras las oscuras nubes y nos regala ese intenso aroma de ambientes más fríos y húmedos, limpiando calles y campos al ritmo de un repiqueteo anárquico...

Tal vez el mejor momento del día, es cuando baja la marea y descubre una inmensa playa donde todo es nuevo y podemos dejar el rastro efímero de las huellas de nuestros pasos en la húmeda arena...

Tal vez el mejor momento del día, es cuando el sol de aleja a descansar y las luces se retiran confundiendo los contornos y uniendo cielo y tierra en el horizonte...

Tal vez el mejor momento del día , es cuando nos encontramos la sonrisa inocente y sincera de un niño…

Tal vez el mejor momento del día, es cuando el cansancio se apodera de nuestro cuerpo y nos arrastra de forma irremediable a un reparador sueño...

Tal vez el mejor momento del día, es cuando damos por concluido el trabajo y observamos que el esfuerzo ha merecido la pena y que nuestra obra queda ahí, día tras día...

Tal vez el mejor momento del día, es aquel que dedicamos a nosotros mismos para crecer como personas y gozar del tiempo libre que dedicaremos a lo que más nos guste...

Pero el mejor momento del día, es justo aquel en que estoy contigo.

sábado, 1 de agosto de 2009

Aguacero

Fantasía y realidad se complementan en nuestros deseos.

Las primeras gotas en su rostro, lo despertaron sorprendido y mirando alrededor, se dio cuenta de que ya había amanecido. Hacía un día soleado, pero sin saber cómo, había comenzado a llover.

Sorprendido, se levantó mientras la lluvia arreciaba y apenas puesto en pie, ya estaba completamente empapado, y en el suelo comenzaban a aparecer los primeros regueros que buscaban la lógica salida siempre hacia abajo.

No había pasado un minuto y sintió que cada vez le costaba más avanzar. El flujo del agua era intenso y el nivel subía con una rapidez insospechada, impidiéndole moverse con la soltura necesaria

Seguía lloviendo con una desconocida intensidad. Pronto el nivel del agua casi le cubría por completo y presa del pánico buscaba el poder salir de allí, sin pararse a pensar qué estaba pasando… pero el agua seguía cayendo con fuerza y tuvo que hacer grandes esfuerzos para permanecer a flote…

Finalmente, el flujo del agua le arrastró una y otra vez al fondo, pese a su desesperada lucha por salir a flote.

La última vez que el agua lo arrastró al fondo, pudo ver las ventanas de su casa… no entendía que pasaba… fuera, en la calle, el sol seguía brillando en un seco día de verano.

jueves, 30 de julio de 2009

Sangre

Un hombre con un arma que se cree Dios, es el Diablo.

Nuevamente, la violencia se antepone a la sensatez humana y, nuevamente, arranca de cuajo, literalmente, la vida de personas que como la gran mayoría, no entenderemos por qué... estaban allí, simplemente... y esas otras vidas que se ha truncado para siempre, la de los que quedan aquí, familias y amigos. Una siembra de violencia gratuita e inútil.

Absurda lucha por una supuesta libertad impuesta a golpes de tiros bombas y sangre inocente... qué clase de justicia puede amparar el asesinato a sangre fría, sólo por que el asesinado es o piensa distinto??? qué clase de ser humano puede llegar a descansar sabiendo que ha sido ejecutor consciente de la selección del reo, de juzgarlo (seguramente sin conocerlo) y dar muerte a personas inocentes, por que seguramente, su único pecado haya sido buscar un trabajo e intentar ser útil a la sociedad...

Absurda locura que ciega y anula los sentidos para arrastrarnos a la barbarie más primitiva mientras se grita que eso es el futuro... no… yo al menos, no quiero un futuro de violencia... es más, no deseo un presente de violencia.

miércoles, 29 de julio de 2009

Sonrie

Si cuando desnudas tu alma nadie es capaz de mirarte… entonces estás solo.

Me gusta la noche cuando el sol desaparece y queda suspendida por encima del horizonte, una inmensa y sonriente Selene… Mira con sus inexistentes ojos y sonríe siempre son esa complicidad de saber guardar secretos… cuantos secretos se guardan en la noche!!!

El silencio, roto por el crujir vivo de la ciudad, es fiel compañero a la sombra de la luz que fuerte en la noche, es nula en el día… el olor del incienso se mezcla con el propio aroma de la ciudad que, abiertas las ventanas de par en par, lucha con saña para respirar en la asfixiante canícula que ahora comienza a retroceder…

Palabras… comienzo a colocar palabras sin orden, sin sentido, sin ganas… no merece la pena escribir a nadie, cuando nadie ha de recibirlo… cuando mirando a mi alrededor, sólo está la noche y la pícara y sonriente Selene que me sigue guardando los secretos… no hay nada… no hay nadie… tal vez eso sea la soledad.




martes, 28 de julio de 2009

Partida

Tenía tanto miedo a morir que se sentó en un rincón, viendo pasar la vida… y sin saberlo, se sentó sólo a esperar su muerte.

La vi partir y en aquél momento, le di la espalda… sabía que el adiós sería definitivo y que difícilmente volveríamos a encontrarnos… a pesar de todo lo que la amaba, tuve que decirle adiós…

Cómo casi todo lo que me pasó, fue más fruto de la casualidad que de los intentos de querer cambiar el mundo que de forma denodada, había intentado sin logro alguno. En una lucha desigual y totalmente desproporcionada, quedaron atrás los años jóvenes de lucha y esfuerzo y cuando pensé que el mundo me había vencido, ella apareció y todo cambió.

Es curioso como el tiempo puede hacer que las sensaciones se desborden o se desvanezcan… todo necesita su tiempo para que madure… pero sólo cuando la fruta está en su punto, es el tiempo de la cosecha…

Sólo en ese momento, el tiempo se detiene para siempre…

lunes, 27 de julio de 2009

Cadena

Si a la ecuación X+Y=Z le sustituimos los valores X e Y por dos números aleatorios escogidos al azar, el resultado de Z será otro número aleatorio que no tendrá ninguna importancia… o tal vez sí… es lo que tiene el azar.

Al cruzarse con él, advirtió ese movimiento donde sus manos mostraban de una forma elocuente una cadena de oro, así como una mirada vacía hacia ningún sitio concreto donde se podía leer para quien lo entendiese “Lo vendo, pero no preguntes de donde ha salido”

Continuó con su paso apresurado mientras su mente reflexionaba sobre aquello que había visto y poco a poco fue aminorando el paso hasta quedarse detenido. Miró hacia atrás y lo miró con mayor detenimiento… el movimiento de la cadena era continuo, y su curiosidad le llevó a volver sobre sus pasos. Al acercarse al improvisado vendedor, este inmediatamente se percató y se la ofreció por 500 Euros. “Oro de ley de 24 kilates” le dijo… Continuó mirando la cadena y supuso que en cualquier establecimiento le pedirían sobre el doble…

Le ofreció 100 Euros y el vendedor le dijo que no, por lo que hizo ademán de alejarse, pero fue en ese momento cuando empezó el regateo… la pieza era de calidad y el precio de salida era muy por debajo de su coste… seguro que pasase lo que pasase, tendría beneficio seguro…

Tras unos diez minutos de discusiones, llegaron a un acuerdo en 350 Euros y la cadena de oro, pasó de unas manos a otras, yéndose los dos hombres por caminos opuestos…

Se sentía satisfecho… había hecho un buen negocio ganando, sin duda, mucho dinero pues la cadena pesaba y se había cerciorado de que el oro fuese de calidad… sí, sin duda había hecho un buen negocio.

Se alejó contento y guardó la cadena en un bolsillo con cuidado. Tomó un taxi y dando una dirección comenzó a ojear el periódico… una noticia en la que no reparó, decía: “Descubierto el cadáver de un hombre joven en su casa. El robo parece ser el móvil del homicidio”

sábado, 25 de julio de 2009

Pi


Pese a la magia del número Pi, este es imperfecto...

"Los decimales no calculados de pi, duermen en un misterioso reino abstracto, donde gozan de una débil realidad, hasta que no son calculados, no se convierten en algo plenamente real, e incluso entonces su realidad es mera cuestión de grado" William James

El amanecer regala un espectáculo de colores difícilmente comparable con nada. El horizonte, compuesto por una amalgama de montañas de aleatorios tamaños, conferían esa belleza desordenada y casi caótica de la irregularidad... Supongo que muy pocas personas habrían colocado así la naturaleza.

Cerca de donde estábamos, el acantilado también nos daba muestras de esas formas caprichosas que ha ido esculpiendo el mar en la roca durante siglos... a ningún ser humano se le habría ocurrido dar esas formas inimaginables que conferían a la pared de escasos metros de altura, un aire de respeto si no de miedo, con excepción de las aves que aprovechaban los escasos salientes para descansar de su casi constante vuelo.

También, cerca de allí estaban los frondosos bosques que, protegidos por ley, se extendían hasta las faldas de la cordillera que servía de horizonte y que el hombre, tras un amplio expolio, se había resignado no sólo a no talar, si no también a proteger. Las luces de la mañana les conferían una peculiar estructuras de sombras y colores mientras se balanceaban lentamente con la brisa salada de la mañana.

Ese paisaje contrastaba con el que había a mi espalda, donde edificios y grúas marcaban entonadas lineas rectas y marcado acento artificial que recortado aún en la penumbra, ejercían también su propia belleza... o más lejos, esos campos de métrica exacta donde vides, olivos o cereales, marcaban unos inexistente límites y fronteras que sólo los hombres se empeñan en respetar...

Sí, la naturaleza, tal vez no fuese perfecta, pero era infinitamente hermosa...

Cogió las muletas y ayudándose de ellas, su única pierna le acompañó hasta el coche... sí, hay muchas cosas que la naturaleza no ha hecho perfectas, pero no dejan de ser hermosas...

Antes de llegar, escuchó el soniquete peculiar de un flautín de un afilador...

viernes, 24 de julio de 2009

Finales

El amor entre el fuego y el hielo, es imposible.

Te empeñas, una vez más
en arrancarme la ilusión
en clavarme un puñal
en mitad del corazón

y me quitas la alegría
cuando empieza a despuntar
la primera luz del día
por que debo despertar

no me robes más los sueños
déjame vivir en paz
que como los niños pequeños
también yo quiero la felicidad

y si me la niega la vida
donde la podré encontrar???
o lo que aún es una duda
ella, quién será???




jueves, 23 de julio de 2009

Metro

Lo que se espera que hagamos, no siempre ha de ser lo deberíamos hacer.

No había otra opción. El despertador sonaba con insistencia hasta que Roberto lograba espabilarse sobre las 6:30 de la mañana... siempre le costaba levantarse, y hasta que no salía a la calle y sentía el aire de la ciudad recorrer sus pulmones, no lograba ser consciente de que el día ya había comenzado y pese a que no le gustase en exceso, el trabajo estaba esperándole.

Cogía el metro no demasiado lejos de su casa y siempre sobre la misma hora. Ya llevaba con esa rutina varios años y reconocía muchos de los rostros que viajaban junto a él, la mayoría con la mirada perdida escuchando música, o aquellos leían libros o diarios o simplemente los que aprovechaban para descansar cerrando los ojos y dejando que los últimos instantes de la mañana les proporcionase esas gotas exprimidas de un descanso que ya había finalizado.

Durante años, había intercambiado miradas que se desviaban evitando una situación de incierta incomodidad que produce mirar a un desconocido a los ojos sin, tal vez, saber muy bien el por qué.

Alicia solía despertase antes de que la radio comenzase a vomitar, prácticamente, las mismas noticias que ya había leído en la prensa digital el día anterior. El mundo no había cambiado tanto cuando ella descansaba, y siempre optimista, comenzaba su jornada con una refrescante ducha y fruta variada. Sus primeros pasos del día siempre estaban medidos con esa misma organización y a partir de ahí, todo era improvisar, aunque por mucho que se empeñase, no solía ser muy distinto un día de otro.

Alicia y Roberto solían coincidir el metro desde… no sabría decir cuánto, pero sí mucho tiempo y hacía ya tiempo que él la había ayudado un día a coger un tren que se iba. Desde entonces se habían saludado con un tímido “hola” cuando alguna vez coincidían a cruzarse en el barrio, pero jamás se hablaban mientras viajaban entre las entrañas de la tierra, empujados y empujando a viajeros y al tiempo.

Roberto, casi siempre que coincidían en el metro, la miraba intentando que ella no se percatase, e intuía que ella era una mujer fresca, alegre, despreocupada, algo alocada y por ello divertida, pues siempre vestía ropa informal y parecía llevar una terrible prisa que en realidad no le conducía a ninguna parte.

También Alicia se había fijado en Roberto y sin querer ser vista por él, lo había analizado, pensando que era ordenado, meticuloso, detallista y muy responsable… un caballero educado y seguro que interesante.

Ambos coincidían en sus análisis y ambos habían pensado en varias ocasiones entablar una conversación para intentar conocerse mejor, pero ninguno de los dos encontró ni el momento, ni el valor para hacerlo.

Durante cerca de un año, todo se repetía casi un regularidad matemática y raro era el día que ambos, junto a otros muchos pasajeros, no coincidían en el metro.

Un día Roberto fue trasladado y desde aquel momento, cambió su rutina ya que la dirección que debía tomar era distinta y también la hora de hacerlo.

No vio a Alicia más, salvo una vez más en su barrio donde se repitió el consabido y tímido “hola” al que ella respondió de igual forma. Aquel día, en ambos, sus pensamientos se vieron ocupados de forma constante por la otra persona y ambos llegaron a la conclusión por separado, de que les gustaba, así que tomaron la determinación de intentar dar un paso más en aquellas breves conversaciones de un simple y escueto saludo

No volvieron a coincidir nunca, pero siempre ambos pensaron que habría pasado si hubiesen dado un paso más allá de lo que se esperaba…

Lástima, por que sin ellos saberlo, ambos eran complementarios… sí, una lástima

lunes, 20 de julio de 2009

Luna

Todo paso, es importante para el camino

Hoy, los noticiarios de todo el mundo y millones de entradas en internet, nos recordarán que hace 40 años, Neil Armstrong se convertía en el primer ser humano que anduvo por la superficie de nuestro satélite.

Desde entonces, se ha discutido si fue verdad o un montaje, si tiene sentido gastar fortunas en eso mientras el mundo está como está o si realmente, será necesario para la humanidad estos avances... No tengo las respuestas, pero sí estoy convencido de que ese acontecimiento, ha sido acojonante

domingo, 19 de julio de 2009

Magia

El que las cosas sean como son, no significa que sean como tienen que ser, pero ¿debemos intentar cambiarlo???

Todos tenemos la idea de un pájaro enjaulado o un pez en una pecera… tal vez sean nuestros prisioneros, o tal vez hayamos convertido a esos seres en lo que realmente son, objetos de adorno. ¿Nos gustaría hacer lo mismo con las personas???

Magia: Arte o ciencia oculta con que se pretende producir, valiéndose de ciertos actos o palabras, o con la intervención de seres imaginables, resultados contrarios a las leyes naturales.

Para qué sirve la magia
si no puedo tenerte
pues fui yo y no el destino
quién deseo quererte
y cuando llegó el momento
de tener que perderte
sólo deseo de verás
una vez más… volver a verte

sábado, 18 de julio de 2009

Fuentes

Un río seco, ya no es un río… pero pueden volver las lluvias

Una de las cosas que más me gusta contemplar en la época de estío, son las fuentes. No sólo es una invitación provocativa para refrescarse (a pesar de que suele estar prohibido) si no que además, es un descanso para la vista por su espectacularidad, para el oído, por el crepitar del agua cuando cae, para el olfato, cuando ese aroma de humedad rompe el monótono olor de la ciudad, para el tacto, cuando nos llega esa ligerísima bruma que escapa y alcanza nuestra piel y por supuesto, para el gusto, cuando aquellas de las que podemos beber, refrescan nuestra garganta y nos dan ese necesario respiro para continuar camino

De todos es conocido que antaño las fuentes eran necesarias para la vida de las ciudades, villas y aldeas, y eran los únicos lugares donde se podía recoger el líquido elemento y donde abrevaban los animales. Hoy, afortunadamente, continúan estando ahí llenando algunos huecos de una variopinta belleza que con el calor, resulta mucho más intensa…

No creo que nadie pueda imaginar una ciudad sin fuentes, y no creo que nadie pueda disfrutar de una fuente cuando esta está seca… por muy sencilla que sea…

Sigo sorprendiéndome de esas cosas pequeñas y simples que resultan ser tan importantes cuando reparamos en ellas… que no siempre es así.

viernes, 17 de julio de 2009

danza



Algunas veces, el más atronador de los ruidos es el silencio.

No es la primera vez que coloco un video de danza irlandesa... tal vez por que sigo buscando la magia de los celtas...

miércoles, 15 de julio de 2009

Calma

Prometí no decirte que te quiero, pero no dejar de quererte.

En la noche, el rugir de los motores de un avión me distrajo del silencio que parecía reinar. Sus intermitentes luces rompían de forma rítmica la oscuridad, colocando de forma breve y centelleante, unas pequeñas estrellas que no eran tales…

Al poco tiempo, la calma y el silencio volvían a instalarse en la noche… intenté centrarme en el silencio, pero no era tal… en la lejanía se oía el murmullo de un escaso tráfico que se entremezclaba con las voces de quienes se cruzan en el camino… algún perro que ladra y ventanas o puertas que sonaban al cerrarse… siempre se cierran puertas y ventanas…

La noche, siempre en oscura calma y mágica algunas veces, brilla con las luces que los hombres nos empeñamos en colocar para prolongar el día más allá de lo que es natural… los colores cambian y las sombras casi desaparecen, moviéndose al son de nuestros pasos tras los escaparates o bajo las farolas…

No hay estrellas y una menguante y escasa Selene se mantiene tímida sobre el horizonte, como pesarosa y cansina…

La calma parece reinar cuando el reloj dejó de ser el protagonista para llegar puntuales… y es entonces cuando llega cierta calma, y cuando podemos disponer de la riqueza del tiempo que nos pertenece, aunque sólo se busque un pequeño instante en esa huida del calor del día…

La noche de la ciudad, puede convertirse en algo mágico y lo artificial puede ser algo tan hermoso como el arte… la noche cubre a la ciudad de luces yse llena de silencios que se entremezclan con cientos de sonidos y sólo queda seguir escuchándolos cuando no tienes otra cosa que escuchar… pero… cuando estás solo… ¿a quién puedo decirle todo esto???


martes, 14 de julio de 2009

Odio

Podrás ver la Luna durante el día, pero jamás el Sol en la noche.

Quien lo ha conocido, sabe de la intensidad del sentimiento del Amor, pero durante estos días, he estado observando a las personas de mi entorno y he intentado averiguar si se habla más de amor o de odio…

Desgraciadamente, es difícil escuchar a alguien que diga que ama a su pareja, a su familia, a sus amigos… es como si nos diese vergüenza expresar algo de lo que en privado o en el anonimato, nos gusta presumir… no es difícil decir “te quiero” a las personas que queremos, y sin embargo, sé por propia experiencia que no se dice todo lo que se supone que deberíamos hacerlo…

Pero en el extremo opuesto, encontramos el odio y ahí, no sólo se odia de forma intensa si no también de forma colectiva. He escuchado frases como “odio a mis vecinos”, “odio a los hombres”, “odio a los extranjeros, “odio a los gays”… y así muchos más colectivos en los que desgraciadamente, estamos todos inmersos sin excepción… así que ya sabéis, tal vez no haya alguien que os quiera, pero seguro que en este mismo momento, formáis parte de la lista opaca de un montón de personas que os (nos) odian, aún sin tener motivos para ello… simplemente, por que somos distintos, por que pensamos distinto, por que… por que así es el ser humano

Tal vez el sentimiento más intenso sea el amor, pero me ha quedado claro que el más numeroso es el odio.

lunes, 13 de julio de 2009

Estío

El alma se nutre de lo que sentimos… y de lo que hacemos sentir a los demás.

El estío nos trae ese calor que nos invita a buscar refugio en las casas, las sombras o el agua… la noche parece alejar la pereza que nos acompaña durante todo el día y presta ya la hora del descanso… paseos a la luz de la luna… sonrisas y risas… abrazos, besos… cariño en definitiva… no importa de quien ni de donde… La madrugada avanza y la luz de la ciudad apaga el brillo de las estrellas. Echo de menos la lluvia que refresque la noche…

EL amanecer llega antes de que me levante y la pereza del cansancio en las dulces horas de la mañana, es un aliciente para desear romper las normas… desearía quedarme en la cama, pero la obligación nos manda levantar… rutinas y más rutinas… círculo vicioso en el que nos hemos dejado atrapar y cada día nos cuesta más alejarnos…

El día comienza y con él todo se renueva… creemos saber lo que nos encontraremos, pero las noticias se van entremezclando… unas buenas… otras malas… la mayoría, indiferentes… el camino de la vida sigue sin ser recto y pequeños quiebros nos desvían de nuestro destino… pero… ¿sabemos cuál es nuestro destino???

No puedo dejar de recordar esos puntos de quiebro que tuvo mi destino antes de ahora… sólo el pasado es el que me dice lo que ha sido, pero tampoco lo que podría haber sido… es lo que es ahora, sin más… pese a esas fiestas populares en pueblos y alquerías donde bailes arrebatan timideces, a esos bosques de otoño inquieto donde los colores se convierten en lienzos vivos, a esas tardes en el puerto escuchando las conversaciones que entre sí mantienen los pequeños barcos de pesca mientras que una pareja deja que el tiempo pase, a esas noches de blanco satén…



Desde aquí quiero dar las gracias a todos aquellos que de una forma u otra consiguen que las dificultades sean menores y las alegrías inmensas… Gracias a todos los que me leen, los que me escriben, los que me llaman, los que me abrazan, los que me regalan sonrisas, los que tienden su mano y que de una u otra forma, cambian el rumbo de mi vida, por que aunque no sepa cuál es mi destino, hay días que son maravillosos de vivir… Gracias por que la vida, con aquellos a quienes quieres, es mucho mejor siempre.