miércoles, 13 de junio de 2012

Vuelta


Nos equivocamos, corregimos, nos volvemos a equivocar, volvemos a corregir… casi nunca se consigue, siempre se intenta.

Vuelves.
Encumbrada en los recuerdos y desempolvando el tiempo
Apenas traes el susurro del viento que te acompaña
Cargas con tu sonrisa hechicera
Con tu mirada de noche y luna
Vuelves
Pero sólo estás de paso
Recorres mi cuerpo y mi alma de nuevo
Me llenas de ti sin yo pedirlo
Te detienes frente a mí sin que te haya buscado
Has vuelto
Y me regalas tus besos y tus caricias
Y me halagas con tus cumplidos
Y me embrujas con tus ritmos conocidos
Y me enloqueces con tus aromas
Vuelves, otra vez y me abres las heridas del pasado
Y cierro los ojos para no verte, pero sé que estás ahí
Cierro los ojos para que no me veas, pero me siento feliz
Y sé que te irás, que sólo estás de paso
Pero sé que volverás… siempre vuelves
Me dolerá tu ausencia de nuevo
Y cuando mi dolor haya pasado, volverás
Siempre vuelves…


domingo, 3 de junio de 2012

Pan

La conquista más difícil, es la del corazón de la persona amada.

Hoy, al comprar el pan, me paré a pensar la cantidad de variaciones que de este producto existen. Supongo que la mayoría conocerá varios tipos distintos, en forma, en tiempos de cocción, en forma de trabajar la harina… pero la gran mayoría, tiene el mismo elemento esencial, precisamente la harina y el resto, son pequeños accesorios, y sin embargo, todos conocemos el producto como pan.

Pensé que también las personas somos un poco así… todos estamos hechos con lo mismo y unas pequeñas diferencias que nos hacen, digamos, únicos (el pan, también suele serlo… será difícil que dos panes sean exactamente iguales). Y sin embargo a las personas las catalogamos por esas pequeñas diferencias: blancos o negros, hombres o mujeres, altos o bajos, limpios o sucios, elegantes o desastrados, ricos o pobres. Incluso por nuestras ideas somos catalogados y separados en grupos: De derechas o de izquierdas, creyentes o agnósticos, cultos o ignorantes… pero no hay ninguna catalogación más allá de eso

Así, la gente no suele diferenciar entre mentirosos o sinceros, honrados o sinvergüenzas, amigos de verdad o enemigos auténticos, amores o simple conocidos.

De esta forma, vamos catalogando en grandes grupos a la gente por algo más sencillo. “Vosotros, los de tal partido político, sois… “ y no nos paramos a pensar que dentro de ese grupo amplio de personas, hay una gran división que se puede hacer después, como ya se ha dicho… en un grupo amplio, hay honrados, violentos, simpáticos, hoscos, amables, idiotas… y también en ese grupo al cual nos enorgullecemos de pertenecer (seguidores de un equipo de futbol, por ejemplo) pasa igual…  Podemos poner en duda las cualidades de un grupo contrario al nuestro, pero no solemos preocuparnos de quienes están más cerca de nosotros, por que pensamos que son similares a nosotros…

Pero las personas son más complejas y de vez en cuando, las sorpresas están ahí, acompañándonos constantemente, y así una persona que siempre quisimos, resulta que jamás nos amó, y aquella que presumía de ser nuestro amigo, desaparece sin dejar rastro… así, vemos que nuestro hermano es más inteligente que nosotros e incluso nos surgen unos extraños celos por conseguir lo que él tiene…  Vemos que nos esforzamos en nuestro trabajo y otro nos roba el mérito, o que intentamos ser sinceros y honrados hasta que alguien nos dice que podemos colarnos en el autobús sin pagar, por que no pasará nada…

Y poco a poco vamos aflorando lo mejor y lo peor de nosotros por que hemos amado, seguro que también nos han amado, y si hemos sido abandonados, es posible que hayamos hecho lo propio. Si no encontramos a un amigo cuando lo necesitábamos, tal vez alguna vez no acudimos a la llamada de otro amigo, o cuando queremos ser honestos, debemos decir alguna “mentirijilla” para evitar problemas innecesarios tal vez, pero no deja de ser una mentira, o cuando la enfermedad de ese familiar cercano nos ahoga, nos roba la vida, nos agota y pensamos e incluso deseamos que venga el final para liberarnos de una obligación que nos hace prisioneros…

Sí, es posible que sigan diciendo que soy de tal partido, que soy de tal religión o que soy un hombre y no una mujer… pero todo lo demás, lo que siento, lo que sueño, lo que sufro, lo que me hace feliz, lo que me roban, lo que robo, lo que en realidad me importa, es algo tan complejo que ni yo mismo sabría ni podría definirlo…  tal vez por ello, soy una persona... ¿o ya no???