La mayoría de las acciones de las personas, sueles ser juzgadas, aunque sea de forma subjetiva por los demás... Ignoro si es algo generalizado, pero yo siempre suelo ponerme del lado del aparentemente débil...
El tiempo, ni me da ni me quita la razón, ya que en la mayoría de las ocasiones, las acciones individuales pasan desapercibidas y aquello que en su día fue una noticia, no pasa de ser una anécdota el día siguiente, pero cuando sabes de alquien que intentando avanazar, cae y se levanta, y vuelve a caer, y vuelve a levantarse, y cae de nuevo para nuevamente, levantarse, y no puedo por menos de dejar de pensar "¿cómo se puede llegar a ser tan torpe???"
3 comentarios:
Puede que no sea problema de torpeza, sino de terquedad... :)
Seguramente cada caída es un aprendizaje que necesita para poder dejar de caer cualquier día de éstos...
Cada uno tiene sus ritmos y la verdad es que nadie escarmienta por boca ajena,sino en carne propia...
Bueno... yo ahi me quedaría con la tenacidad de aquel que aún habiendose caído un y mil veces, una y mil veces saca fuerzas de donde puede... y logra volver a levantar.
Saludos!
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