martes, 29 de abril de 2008

Foco


Se enciende un foco y tú eres la única persona que queda iluminada. De pronto, te sientes importante, pero sabes que estás encima de un escenario donde sólo se presentará una exclusiva función, única e irrepetible.

No existe guión ni tiempo para ensayar… A pesar de que la idea está clara en tu mente, muchas veces has de improvisar y muy pocas veces tienes opción de repetir…

El foco se encarga de que te sientas sólo en el escenario, y tú, con tu propio monólogo, debes comenzar la actuación…

Cuando acabes, las luces se encenderán y tal vez, sólo tal vez, podrás encontrarte con los aplausos… o con el silencio… Será ese momento cuando hayas de valorar si tu obra te ha gustado a ti.

4 comentarios:

PIZARR dijo...

Me viene a la mente el teatro de la vida, con sus improvisaciones, sus aciertos y sus equivocaciones, que en definitiva a quién tienen que satisfacer es a nosotros mismos.

O quizás eres actor... ¿ quien sabe ?

Has acertado con el tema de los manuscritos... alguna otra joya me conquistó... me sedujo adecuadamente y terminó en mis brazos.

Un beso

la danza de la vida dijo...

Y yo la titularia: suspiros de mi vida.
Espero que cada escena de tu vida te regale los suficientes silencios para escuchar los grandes aplausos...un beso

Isabel dijo...

El caso es que todos representamos ese papel,pero pocos aplausos se oyen al final.Me encanta esa canción,Pablo.Y tu texto más.Un abrazo.

Manuela Fernández dijo...

La vida: donde cada personaje es representado por un determinado actor de forma intransferible.