Sí, es el peligro de no poner límites a nada. Demasiado consentidores nos estamos volviendo, efectivamente. Y digo yo... ¿qué tiene de malo decir que no cuando es mucho mejor decir que no?
Buho, ayer escribí un comentario larguísimo sobre la libertad y veo que se ha esfumado.
Respecto a los "Avances" no puedo decir nada más que lo que graficamente tan bien has dicho.
Esa es la clave... consentimos... permitimos... y pasa lo que pasa...
Es una labor de cada día, cada minuto, con los niños, de ellos y de su educación parte todo. Pero hoy apenas la gente les dedica tiempo. La vida acelerada convierte las casas y las familias en una especie de pensión en la que cada cual va a su bola.
A menudo es más facil decir si, para evitar problemas y poco a poco... se convierten en personas que no admiten la frustración, ni la negativa, venga de donde venga.
4 comentarios:
Escalofriantemente cierto. Hay que tomar medidas YA. Un besazo
Sí, es el peligro de no poner límites a nada.
Demasiado consentidores nos estamos volviendo, efectivamente.
Y digo yo... ¿qué tiene de malo decir que no cuando es mucho mejor decir que no?
Un beso enorme, búho.
Buho, ayer escribí un comentario larguísimo sobre la libertad y veo que se ha esfumado.
Respecto a los "Avances" no puedo decir nada más que lo que graficamente tan bien has dicho.
Esa es la clave... consentimos... permitimos... y pasa lo que pasa...
Es una labor de cada día, cada minuto, con los niños, de ellos y de su educación parte todo. Pero hoy apenas la gente les dedica tiempo. La vida acelerada convierte las casas y las familias en una especie de pensión en la que cada cual va a su bola.
A menudo es más facil decir si, para evitar problemas y poco a poco... se convierten en personas que no admiten la frustración, ni la negativa, venga de donde venga.
En fin...
Un beso Buho.
Publicar un comentario