domingo, 21 de febrero de 2010

Destino

A veces, resulta muy difícil desear lo que se necesita.

Vueltas y más vueltas a una idea que no termina de fraguar… mi cabeza se embota y mi corazón se parapeta en recuerdos pasados… apenas se asoma a los sueños futuros… la realidad se empeña una y otra vez en recordarme mis pocos éxitos y mis múltiples fracasos…

Hasta donde he llegado???... la respuesta es obvia… sólo hasta aquí. Y dónde quería haber llegado??? ¿acaso importa eso ahora??? no, ya no… lo importante, lo realmente importante, es que ahora estoy aquí.

¿Cuántos cambios querría hacer en mi vida??? muchos, sin duda alguna… y en la vida de los demás??? alguno, no lo niego en absoluto… mi vida no sólo es mía, y mis circunstancias tampoco me pertenecen al pleno… pero ya no importa pues el camino que escogí es este, con todas sus consecuencias.

Hace un par de días pensaba escribir sobre Lucia, una mujer ya entrada en años, cargada con un viejo capazo donde guarda las pocas pertenencias que ha ido pudiendo acumular en su vida, salvo sus ropas que, por escasas, van todas sobrepuestas en estos tiempos de invierno, intentando abrigar su cansado y dolorido cuerpo. Lucía es una de esas cientos de miles, tal vez millones de personas anónimas que por una u otra causa pueden pasar inadvertidas a todos... una mujer con pasado pero sin futuro... una mujer que en realidad, sólo posee recuerdos y experiencias... esa es toda su vida… y a casi nadie le importa en realidad.

Me pregunto si al final también mi vida será así… si los recuerdos del pasado serán más importantes que los sueños del futuro… si la soledad será una fiel y constante compañera o si los amigos presidirán mis horas… si el esfuerzo de una vida de trabajo habrá valido la pena y no me habrá robado, tan sólo, el tiempo de vida… No hay mucha diferencia entre esas personas que deambulan sin tener donde ir, por las calles, buscando el refugio entre cartones y alcohol barato, y esos otros que se sientan cómodamente contemplando el televisor sin nada que ver en realidad… las vidas huecas, vacías, o esas vidas forjadas de recuerdos nada más con una gran historia pasada y ningún futuro ya por delante…

Hoy, mi presente es muy sencillo… miles de personas, millones tal vez, hacen lo mismo que yo, viven igual que yo… pero la gente que me importa, sigue viviendo en mi corazón, por siempre.






4 comentarios:

Coronita de reina dijo...

El otro día leía en una revista de decoración, fijate...que cosa tan superficial, que:
"Para amueblar una casa pequeña, hay que olvidarse de los metros que le faltan y centrarse en los que tiene."
A cuantas cosas se puede aplicar???
Te lo dejo aquí para pensar...yo no he podido dejar de hacerlo
Un beso, Buho.

Unknown dijo...

Buho...

No te voy a contestar...

... recrearse.. en ciertos temas...

.... se llama según estudié...


....masoquismo.

....y bien.

si,si , si, No te enfades.

Yo tambien soy masoquista como todo elmundo, el que esté libre que tire la primera piedra..pero.


Aire en los pulmones.

...y a vivir el ahora.... aquí.. cada segundo, cada minuto.

Buho.. que lavida es muy corta.

... cortísima....

..y cuando no respires, nitengas corazón.. ni estes aqúi... cuantas cosas buenas nos habremos perdido....?????

Buho..

..voy a tener que publicitarte en mi blog... que eres perezoso y no tienes casi entradicas, ja, ja, ja.

Besitos

Desde mi rincón... dijo...

Desear lo que se necesita no es dificil, conseguir lo que se desea, ahi está el problema.
Nos llegan cuentas para pagar en la vida, pero tambien, nos llegan cuentas para hacer collares.
Imagina que cada momento feliz, es una cuenta, y no para pagar, sino para colgarla en ese collar...
No estaria bien, que al final, tuvieramos un largo y precioso tesoro que adornase nuestra vida???
Que mas da lo malo que dejemos atrás, lo importante es que la felicidad esta delante de nosotros, y debemos alcanzarla.
Al final, solo seremos los recuerdos que seamos capaces de atesorar.
Cuelgatelo alrededor del cuello, pero cuidado... no aprietes mucho. No permitas que te asfixie, y sigue viviendo y respirando.

Un beso, Buho.

Desde mi rincón...

Manuela Fernández dijo...

Yo no lo veo como tu. Yo pienso que no hay dos vidas que sean iguales y pienso también que no hay vida que sea simple, ni hay vida sin futuro. Lo que sí hay son épocas en que todo lo vemos de forma pesimista y no nos hace ilusión nada, pero a esta época le sigue otra de optimismo, y así vamos viviendo.