viernes, 20 de junio de 2008

Credulidad

Hace ya tiempo que fui abordado por integrantes de una religión con el propósito de “convertirme”. No lo consiguieron y tras una breve conversación, cada cual siguió su camino.

Desde entonces, me pregunto qué pasaría si un día, el mismísimo Dios (que cada cual aplique el suyo, si es que lo tiene) se nos acercase y nos dijese que hemos de ser “buenos”. Supongo que yo, particularmente, tampoco le haría mucho caso… Es más, podría darse por contento si no pensase que se trata de un loco, un borracho o un drogadicto… ¿cómo se le ocurre a alguien acercarse a otra persona y decirle que (y sobre todo como) ha de ser “bueno”???

Por otro lado, es raro el día en que no recibo alguno de esos correos que ya han dejado de ser cadenas y terminó de amenazar con volverse impotente si no se enviaba en 1 hora a 38 personas, pero cuyo contenido sigue siendo similar… “Sé bueno, disfruta de la vida, ama, besa, abraza…” y curiosamente, seguimos sin saber de donde viene (a pesar de que nos lo envíe un conocido) pero le presto más atención… e incluso, algunas veces sonrío en silencio pensando que tiene razón…

Pero el desencadenante de todo esto, me llegó ayer, con una lista de productos que contenían ingredientes de buena calidad y otros que no… Sé que la persona que me lo envió lo hizo con toda la buena voluntad del mundo, pero eso me lleva a pensar si todo lo que recibimos escrito nos llama la atención.

Hemos tenido “boicots” a marcas, productos y regiones, y listas para salvar vidas donde una larga fila de nombres queda impresa… nadie se cuestiona la fuente y los origines y es tan simple como si yo ahora, lanzo una presentación donde, a mi entender, puedo decir que ciertas culturas entre sus ropajes, pueden esconder explosivos y hay algunas personas dispuestas a morir por sus creencias… Mi idea, personal, puede comenzar a dar la vuelta al mundo, crear una alarma innecesaria y colocar a una comunidad en el punto de mira de la desconfianza.

Creo que es impresionante el poder de la palabra escrita y muchos, al leer los titulares, ya creemos que tenemos el conocimiento necesario para discutir, afirmar o negar aquello… y otros, por leer unas líneas anónimas en internet, dan por seguro que es tan cierto como que está escrito…

El cuarto poder se acentúa y sus tentáculos llegan hasta nuestros dedos colocados en el teclado… Si alguna vez Dios te susurra al oído que debes ser “bueno” ¿Quién es quien escribe esos artículos???

Intentaré reflexionar sobre el bien y el mal antes de creer lo que leo y desconfiar de lo que me dicen

5 comentarios:

la danza de la vida dijo...

Yo he sido una de esas personas que han enviado textos, archivos por diferentes motivos, ahora no quiero ponerle energía a esos que boicotean y que asuntan, es más algunos ya leyendo las dos primeras frases me salgo directamente del pps o del correo y le doy a eliminar directamente...quizás por ello soy inconsciente o mala persona para algunos, no lo sé, y lo cierto es que a estas alturas me importa poco, al igual que aquellos que te enseñan como ha de ser un buen amigo, a veces más bien que unas enseñanzas parecen una lista de reproches, por que me pregunto si el que lo escribe o el que lo envia es como dice dicho archivo....Recuerdo en mis tiempos de comunidades de msn, cuando estaban habilitados los chats, en nuestros foros, habian cada dia no sé cuantos mensajes de lo buenos que deberiamos ser, algunos con varias respuestas, sí, pero...cuando alguien acusaba de algo, las respuestas se multiplicaban por mil entrado a trapo y metiendo leña, recuerdo el mosqueo que pillé, por la incoherencia del asunto, nos leemos todo eso, hacemos que nos lo creemos, hacemos que lo llevamos a la practica, pero la hora de la verdad......
Seguramente, que si algún día de verdad alguien que fuera el mismisimo Dios(cada cual es suyo) se le sentase en un banco de un parque y le empezara hablar, me temo, que lo tomariamos por un aútentico loco....en fín, que cada cual se mire a sí mismo y se mejore como persona, en vez de mirar tanto lo buenos o malos que son los demás...al fin y al cabo, quien conoce el baremo real de donde está lo bueno o lo malo, donde está la tabla de medir lo que somos, lo que no, lo que hemos mejorado?....
Que cada uno viva con el corazón, supongo que allí es donde reside realmente el amor, y sin amor es imposible vivir....un beso

Anónimo dijo...

Siempre desconfío de lo que leo en los diarios, en Internet, en los mails. Siempre cotejo todo, siempre busco información a más no poder hasta sacar mis propias conclusiones. La era de la tecnología y la comunicación nos ha llevado a que la información la maneje cualquiera. Es lamentable pero también es una oportunidad para volvernos más eficientes como investigadores. Y las cadenas no son más que un arma de los que buscan hacer listas para spam.
Besos desconfiados.

Alberto dijo...

Siempre es más sano engañarse alguna vez que desconfiar de lo que te dicen, pero no bajes la guardia nunca.

Un saludo!

Manuela Fernández dijo...

Yo creo que en el fondo todas las religiones son una misma, un mismo Dios, hablo de religiones y no de sectas y demás historias.
En cuanto a que viniese el mismísimo Dios y nos dijese qué tenemos que hacer... ¿no vino ya hace 2008 años y lo mataron?

dijo...

simplemente un beso enorme...
Rox