sábado, 14 de junio de 2008

Cigarra

Supongo que la mayoría conoce la fábula de La Fontaine La cigarra y la hormiga

Tengo la suerte (por que creo que es una suerte) de vivir en una calle peculiar de la ciudad, ya que es muy tranquila y posee pequeños jardines y grandes árboles. Hace ya mucho tiempo que pienso en la posibilidad de que esos árboles, en lugar de ser chopos, acacias, álamos, moreras, olmos, plátanos y otras varias especies cuyo principal fin en la ciudad es el de dar sombra a la ciudad, fuesen manzanos, peras, melocotoneros, membrillos, cerezos… Que bonito sería que las calles de nuestras ciudades, además de sombra, nos proporcionasen unas generosas raciones de frutas variadas…

Pensemos que pasaría… Nada… no pasaría nada, por que siempre habría alguien que, presuroso, avaricioso, temeroso de perder la ganga y egoísta absoluto, se encargaría de arrasar los frutos antes, incluso, de que tuviesen tan siquiera color… al menos, eso pienso…

Así somos las personas, que en cuanto tenemos oportunidad de coger algo, no dudamos en hacerlo, máxime cuando existe la oportunidad de perderlo a manos de otros… Ignoro cuantas manzanas puede dar un árbol en una temporada, pero estoy seguro que podríamos tomar un par de ellas cada uno, sin problema alguno… sí, alguno se haría con la cosecha completa.

¿Qué pasa por las noches en las ciudades??? La vida cambia de rumbo y la diversión de apodera de casi todos los rincones y cientos de locales dedicados al ocio… Si nos damos un paseo por la mayoría de las ciudades de España, podremos ver que en la madrugada vive una población dispuesta, fundamentalmente, a divertirse… vehículos repletos de jóvenes y no tan jóvenes, locales abarrotados de gente con cientos de vatios de luces y miles de vatios de sonido… aire acondicionado forzando la marcha para aliviar el calor de los cuerpos sudosos en verano y curiosos aparatos de calefacción exterior a base de aire y gas, que mantienen medianamente templados, los cuerpos abrigados en el invierno en el exterior, cuando no se trata de subir el termómetro en el interior.

En esos momentos, nadie se acuerda de aquello que nos hemos dado en llamar “cambio climático”. Millones de kilowatios se encargan de mantener el ambiente de la diversión todas las noches, y cientos de litros de combustible son quedamos con el único objetivo de mantener el ocio fuera del tiempo del trabajo.

Pero no podemos lamentarnos de la crisis (o lo que sea), no… por que ahora que todos protestamos por el alto precio de la vivienda, no nos acordamos cuando hace unos años, vendimos nuestra antigua vivienda, ganando unos cuantos miles de euros en la transacción… nadie, o al menos, una insignificante minoría, ha vendido su antigua vivienda sin llevarse un pingüe beneficio que, sin embargo ahora, se ha convertido en un pellizco añadido a la subida de la vivienda…

Y ahora que llega la crisis, o como cada uno quiera llamarlo, nos lamentamos… El precio del dinero se ha puesto por las nubes, cuando nadie nos aseguraba que no subiese y nadie contrató (o sólo una minoría) un interés fijo…

Que curioso que estos días que hay huelga de los controladores de estacionamiento, el flujo de los automóviles que acceden al centro de la cuidad, se ha incrementado más de un 30%... y el colectivo de los transportistas se quejan de que sube el precio el combustible… No entiendo como si sube el precio del combustible, se incrementa el uso del automóvil particular…

Sí, estamos en crisis (o lo que sea), pero no queremos renunciar a lo que ya tenemos, así que ahora que hay problemas, debemos culpar a alguien de nuestra desgracia… y nos quejaos de que sube el recibo de la luz, pero no dejamos de consumir y si hace unos años nos refrescábamos a base de abanico y botijo de barro fino, hoy nos refrescamos con un conjunto de frigorífico “no frost” y una excelente combinación de aire acondicionado “inverter”. Sí… hace unos años, cuando se acababa la TV en la noche, se desconectaba y cada uno se iba a la cama… hoy, además de que cada persona tiene su propia TV en la casa (si no es más) tenemos el PC, el DVD, el TDT, la PS3, y el cargador del móvil… ni que decir tiene que no desconectamos nada y lo dejamos todo en “stand by” es decir, consumiendo poquito, pero consumiendo…

Aún así a nadie, o a casi nadie, parece que le preocupe, o se acuerde (como sucede con aquella tormenta de Birmania, que a falta de noticias, quedó olvidada) lo que se ha dado en llamar el tsunami silencioso, y es que el invento de los biocombustibles, a occidente le ha incrementado los precios, pero ¿realmente nos es un problema que el arroz duplique su precio??? No lo creo, realmente, aunque es un problema… pero… ¿qué ocurre en oriente, donde el arroz es casi el único alimento??? También ha duplicado su precio y si aquí tenemos crisis (o lo que sea) allí, comienza la hambruna.. .

No voy a culpar a nadie de la crisis (o lo que sea) que se nos avecina, por que creo que todos tenemos una parte de culpa… pequeña, pero no menos importante… y que como si fuese una tormenta de verano, ahí está… y nos guste o no, deberemos aprender a vivir con ella… así pues, seguiremos viendo cada día más y más vehículos con un solo ocupante que multiplicará el consumo de combustible, lo que generará la demanda y obligará a seguir subiendo los precios… y seguiremos saliendo por la noche a divertirnos, a bailar y a beber bebidas refrescantes con hielo generado con la energía que, evidentemente, terminará incrementándose en su precio ante el aumento del consumo…

Este pequeño ejemplo, además debería hacernos reflexionar sobre ese ejemplo del cambio climático que tanto alardeamos de que hay que pararlo… ¿Cómo se puede pretender dar una cierta normalidad al planeta, cuando estamos convencidos de que nuestro ritmo biológico se puede alterar viviendo de noche como si no pasase nada???

¿Excepciones??? Claro que hay excepciones… cientos… miles… pero no creo que haya confundir una excepción con una excusa…

Como siempre…, que alguien haga algo

3 comentarios:

PIZARR dijo...

Buho, muy de acuerdo contigo y añado que ultimamente " discuto" bastante cuando me hablan de la famosa crisis, proque sinceramente, no la veo por casi ningún lado.

Como fuera de casa, casi todos los días... todo está lleno, siempre tengo que esperar.

Mi trabajo es un excelente barometro económico y de momento la crisis no la vemos por ningún lado

A las 7 de la tarde no se puede ni pasar por las zonas de bares de mi ciudad.

A la hora del desayuno, la mitad de los días me quedo de pies, porque estan los bares de la zona del trabajo abarrotados.

No hay entradas para muchos espectáculos hasta dentro de meses.

Se pagan 1200 y 1500 euros por una quincena de un apartamentucho en la playa.

????????

Si esto es una crisis, no tenemos verguenza de ser capaces de mirar a la cara a tantos millones de personas que malviven en otros paises.

En fin... Un besito desde Bilbo

Unknown dijo...

Magnifico..... "que alguien haga algo", "que nos lo den hecho", "que me den"......

Colgarse es lo más facíl, centrarse en la tarea propia, en nuestras responsabilidades, en la tarea que hay que hacer en cada momento... eso es dificil... exige... disciplina... compromiso, reflexión..... constancia......

¿Y quien de nosotros quiere eso de manera continuada?

Un ratito si aguanto... pero mucho rato....

Un besazo

Alberto dijo...

No hay mejor predicadora que la hormiga, que no dice nada...
Mientras la cigarra dice menos tostandose al sol.

Asi contaba mi abuela la fábula.

Un abrazo.