
Soy un esclavo de mi libertad
A veces me pregunto donde vamos tan rápido y que perseguimos durante todo el día, durante toda la vida... nos esforzamos en ser más... ¿más??? ¿competimos acaso??? Si, solemos hacerlo contra nosotros mismos
Recuerdo aquellos documentales de Félix Rodríguez de la Fuente, donde salían unos indios de una tribu del Amazonas, que se pasaban el día tumbados en las hamacas y cuando se acaba el sustento se iban de busca de alimento... cazaban algún bicho (que cada cual piense lo que quiera) y volvían a tumbarse dejando que el tiempo pasase a su lado, casi sin tocarles...
Nosotros somos todo lo contrario... vamos tras el tiempo que nos empeñamos en extender más allá de su límite... buscamos actividades, ocio, diversión, escapadas... y necesitamos pagarlas... y necesitamos trabajar... y todo eso nos obliga a repartir el tiempo en mil pedazos, tan insignificantes como inservibles la mayoría de las veces... ya que muchas veces, nos convertimos, en espectadores de los hechos (y se puede poner lo que se desee) ajenos, malgastando, a veces inútilmente, nuestro escaso tiempo
"No es la última gota la que vacía la clepsidra, si no que todas han participado" (Séneca)
me voy, que tengo prisa...