martes, 15 de marzo de 2011

Ciber

No importa cuan larga sea la noche… siempre amanece

Con qué facilidad adoptamos las palabras… hoy en día, “ciber” es algo tan popular que muchos no sabríamos decir si es una abreviatura o sólo un prefijo.

Antaño, la gente salía a la calle, hablaban unos con otros, intercambiaban opiniones, criticaban… se relacionaban en definitiva

Hoy todo está cambiando tan rápidamente que la palabra “ciber” se ha introducido en nuestras vidas de forma tan profunda que creo que compite en actividad con esa otra forma de vida que algunos llaman “real” aunque la vida real lo es todo… y así tenemos cibercafé, ciberamigos, ciberrelaciones, ciberpareja, cibersexo… vamos que todavía no se ha inventado, pero siguiendo la serie, pronto serían ciber hijos, ciber trabajo, etc…

Pues con tanto ciber, también han aparecido las ciber ONG’s y mira por donde, hoy una de ellas se ha dirigido a mí para solicitar mi óvolo con el que contribuir a ayudar a Japón.

Realmente ignoro si es una buena causa o un vulgar fraude pero lo que no sabría definir es si una ciber ayuda o un ciber timo…

En cualquier caso, me entristece pensar que las desgracias humanas son usadas sin compasión ni escrúpulos para el beneficio de unos pocos. Ayer mismo comentaba con una amiga sobre la aportación de ayuda a Haiti tras el terremoto que tuvieron en el 2009 y que al pasar el tiempo, parece que se ha ido desvaneciendo en el aire pues apenas ha cambiado nada…

Fe, es lo que aún me queda para pensar que son casos aislados, que la aportación que se hace por parte del estado o particulares, llega en su mayor parte a su destino, que al final del año, muchas personas consiguen subsistir con alimentos , abrigo o medicación, que de otra forma no habrían podido sobrevivir…

Ahora Japón es la víctima y parece que es menos urgente cuando siguen siendo personas, cuando vagan sin claridad por un paisaje arrasado y destruido, donde la esperanza se diluye entre el dolor…

Tal vez los ciber timos sean menos dolorosos que los timos, pero igual de dañinos y crueles

sábado, 12 de marzo de 2011

Memoria

Tal vez el caos forma parte importante del orden

Aún llueve… no ha parado en toda la tarde y es curioso, por que hace un par de días deseaba que lo hiciese… echaba de menos poder mirar los charcos los círculos que las gotas hacen al caer en ellos y cómo los círculos concéntricos se encrespan bajo la luz de las farolas… echaba de menos el mirar el horizonte y ver la tenue luz de la ciudad en la noche difuminada por la cortina de agua… echaba de menos el crepitar del agua en el alfeizar y el cristal de la ventana… echaba de menos el agua recorriendo mi piel mientras camino hacia casa… echaba de menos cómo la noche aletarga el tráfico y cómo las calles brillan y parecen limpias engañando a los ojos, que no al corazón…

Hablamos de la naturaleza cómo si nosotros, los seres humanos, fuésemos los conductores de ella… cierto que podemos ayudar a su destrucción con mucha más facilidad que a su mantenimiento, pero algunas veces pienso que a la naturaleza, su parte biológica le es mucho menos necesaria que la parte geológica, y la naturaleza es así de simple… todo forma parte de todo y nada es ni más ni menos importante… el cambio se produce y sus consecuencias, catastróficas para nosotros, son pronto olvidadas por los que hoy miramos con ojos escépticos lo que ha ocurrido, pero el tiempo sigue haciendo su trabajo y las generaciones futuras no recordarán apenas nada aunque nosotros nos empeñemos en hacer monumentos y mantener vivos los recuerdos de estos acontecimientos… pero en realidad los recuerdos se irán diluyendo y estas celebraciones y recuerdos, es posible que con el tiempo se conviertan en fiestas cuyo origen será confuso pero que nuestros descendientes celebrarán con un puente y un viaje a la playa…

Pero mientras, hay recuerdos vivos, palpitantes, cómo si hubiese sido ayer mismo aunque ya ha pasado siete años…

En ese tiempo han pasado muchas cosas, hemos conocido a muchas personas, hemos andado muchos caminos, hemos compartido muchas risas, hemos ahogado muchas lágrimas… en ese tiempo hemos seguido viviendo manteniendo recuerdos vivos y palpites… y cómo si fuese ayer mismo, aún me siento afortunado… en este tiempo en que el recuerdo ha estado palpitante, la vida nos ha mantenido unidos, precisamente, por ese recuerdo


jueves, 10 de marzo de 2011

Simpleza

Lo simple no tiene por que no ser hermoso e importante.

Es curioso cómo un poco de azúcar es capaz de endulzar el sabor de algunos alimentos haciéndolos más agradables al gusto… o cómo un poco de sal también convierte en más sabroso algunos platos. Pequeños y simples complementos conocidos y usados por la gran mayoría y que parecen casi imprescindibles…

Qué sencillo el ciclo del agua… la mayoría lo entendemos… el mar se evapora por efecto del calor y ese vapor se desplaza en las nubes y se deposita en el suelo en forma de lluvia, nieve, rocío… y en su devenir se transforma en pequeños arroyos que configuran los grandes ríos… y en su viaje de detiene y lame orillas, riega cultivos, genera vida y termina en el mar donde el ciclo comienza otra vez… y en todo ese proceso, el agua nos calma la sed, nos refresca, nos limpia, nos divierte…

Que agradable el contacto de un ser vivo… acariciar un perro, abrazar a un amigo, besar a quien amas… ignoro cuál es el motivo pero siempre me produce una honda satisfacción esa cercanía que se contagia y me transmite vida en toda su plenitud…

Tal vez el tiempo me siga siendo escaso, el dinero esquivo y el trabajo un amo cruel… pero creo que sigo poseyendo la simpleza de las cosas hermosas e importantes… o como dijo un amigo mío: España es un país donde uno de cada cinco trabajadores está parado, y el resto, ahora, tendrá que ir más despacio (nuevo límite de velocidad)

miércoles, 2 de marzo de 2011

Cartas

La Ley es un conjunto de normas pensadas con mejor o menor fortuna por un pequeño grupo de personas, confirmada por otro pequeño grupo de personas y aceptadas por todos los demás, si bien, en la mayoría de los casos, es por miedo al castigo que es temido por la mayoría, tras haber sido aprobado por un pequeño grupo de personas, en función de lo que se le ha ocurrido a otro grupo más reducido aún…

Hoy he recibido, dentro de esos correos que con gracia y simpatía solemos intercambiar con nuestros mejores deseos, un texto que bajo la presunta firma de Pérez Reverte, incita poco más que a una revolución o alzamiento contra nuestros representantes y nuestra sociedad.

No es ningún deshonor gritar que no se está conforme con lo que tenemos… Yo mismo puedo decir aquí, por que me siento libre de decirlo y cuento con la posibilidad de hacerlo, que creo que la clase política en España deja mucho que desear, que la justicia es lenta y qué sé yo cuantas cosas más…

Lo que me ha parecido un poco hipócrita es que la firma del supuesto manifiesto no creo que haya sido escrita por quien se supone, y con eso sólo busca crear mayor creencia (No he podido resistirme a buscar en Internet dicho manifiesto y no aparece)… pero lo triste es que el autor, con sus quejas y sus reproches, ya comienza engañando a sus lectores…

Cierto que en España somos complacientes y tranquilos y que solemos adaptarnos con bastante pereza a las circunstancias, aceptando con vehemencia que uno de cada cinco trabajadores no tenga trabajo, que nos suban los impuestos aquellos que prometieron que no lo harían, o que el tan traído estado del bienestar se haya quedado en una vacuidad entre panfletos olvidados…

Pero aún así, creo que debemos mantener un mínimo de dignidad, un mínimo de ética, un mínimo de civismo y mucho, mucho afecto para quienes están a nuestro lado… puedo equivocarme, pero será mi responsabilidad… claro que también es muy popular “tirar la piedra y esconder la mano”



Vale, vale… la música, tal vez no tenga mucho que ver con esto, pero es que hoy la escuché a un artista callejero, en una genial interpretación y me ha llenado el alma… aquí la dejo…

viernes, 25 de febrero de 2011

Encuentro

Si haces una muralla para defenderte de tus enemigos, ten mucho cuidado por que tal vez tampoco tus amigos puedan llegar a ti

El encuentro fue tan casual cómo inesperado. Hacía ya varios años que no sabía de ella… había pasado, no sin dolor, el tiempo donde miraba el teléfono en busca de un mensaje, donde escudriñaba el correo en busca unas palabras, donde giraba cada esquina con la esperanza de encontrarla…

Cuando la vi tras tanto tiempo, pareció que todo siguió tal cual era en el pasado… Hablamos animadamente tras el saludo y una rápida puesta al día… hablamos de lo que fue, de lo que pudo haber sido, de lo que nunca será… Pasamos así, anclados en el pasado de nuevo, casi toda la tarde…

Al ver cómo se alejaba, me di cuenta de que había sido estupendo volver a revivir el pasado… Cuando ella desapareció en la distancia, me giré y aprecié lo maravilloso que es vivir el presente.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Oportunidad

Si la materia ni crea ni se destruye, y el dinero es materia… entonces cuando alguien es más rico, es por que otro es más pobre.

Hoy perdí un tren… carreras, prisas, la precipitación de la mañana… y perdí un tren… todo un esfuerzo baldío para nada… No sé si había pasado un minuto, y ya llegó otro. Estaba casi vacío, frente al anterior que se encontraba abarrotado de gente. Me senté, fui leyendo el periódico cómodamente y llegué cómo siempre… tal vez uno o dos minutos más tarde.

Las oportunidades, parece que siempre se pierden y no somos capaces de apreciar que algunas veces, precisamente por no haber tomado un tren, podemos tomar otro mejor… un destino que se cambia a última hora, una relación que se acaba, un trabajo que se pierde, una casa que no se puede comprar… hay cosas importantes y otras no tanto, pero tal vez cada oportunidad perdida, no es si no una oportunidad ganada…. ¿por qué no???

viernes, 18 de febrero de 2011

Neuronas

Aunque el resultado suele ser similar, no es igual caer que bajar.

Comentando el último programa de “Redes”, de Eduard Punset, enlazamos con el texto de la camiseta del encabezado, que no por graciosa, es incierta.

La opción era la de comentar el programa, que puede verse en el enlace anterior, pero resulta demasiado amplio para mis cortas entendederas, así que mejor que cada cual saque sus conclusiones (demasiado extensas cómo para describirlas brevemente en unas pocas líneas) pues por extensión, a mí sí parece increíblemente importante, la función de cada una de las células del cuerpo…

Tras la frase “ninguna de tus neuronas sabe quién eres… ni le importa”, se esconde un orden que la naturaleza ha establecido para que cada organismo funcione de la forma más eficaz posible. Cada neurona cumple su cometido lo mejor que se pueda y no se preocupa de hacer cualquier otra cosa… y ese ejemplo es generalizable a cada una de las células que componen los seres vivos… Ninguno de nosotros suele preocuparse de algo tan sencillo y necesario cómo respirar, cómo ver, cómo escuchar, cómo sentir… todas las células se han organizado sin que haya ningún líder, y ellas han configurado el ser vivo… tú o yo…

Al cerrar los ojos, “siento” a mi yo en mi cerebro… tal vez por que la consciencia de la vida esté más cerca del sentido de la vista, muy importante en la mayoría… o tal vez por que en realidad, la verdadera identidad de las personas está precisamente ahí, en el cerebro… si esto fuese así, se acabó el poner “con todo mi corazón” tras afirmaciones de sentimientos… deberíamos cambiarlo por “todo mi cerebro”.

Así pues, nuestro propio cuerpo ha sido capaz de fabricar, colocar, organizar, y hacer funcionar a cientos de miles de células, cada una de las cuales, de forma independiente al resto, asumen su misión y cumple su requisito de forma ejemplar. Gracias a esto, el ser vivo, puede sentirse vivo…

No hay nada que obligue a una célula a hacer lo que debe hacer, pero lo hace… puede enfermar, puede envejecer, puede resultar defectuosa, pero aún así, mientras le es posible, cumple su misión hasta el final, sin importarle absolutamente nada más. ¿Sería esto extrapolable a cualquier sociedad???

Imaginemos que nuestra sociedad, a los seres humanos, se nos encomienda ser cómo las células y que cada uno, ha de cumplir su cometido para que todo pueda funcionar… Vaya caos que se montaría… ¿Quién de todos… de cualquiera… aceptaría de buen grado su papel??? Seguro que diríamos aquello de “No es justo… yo quiero ser…” y entonces se formarían partidos políticos para ver quien pone orden (una vez que hayan sido elegidos en las urnas)… empresarios para poder darnos trabajos y así poder alimentarnos… sindicatos para… bueno, para algo estarán… bancos, instituciones, transportes… y así, entre todos, hacer que toda la raza humana pueda funcionar igual que si fuera un solo organismo vivo… ¿alguien pilla la diferencia???

Sólo nos queda entender el por qué tenemos esos sentimientos que, a veces por suerte y otras por desgracia, nos hacen ser humanos en lugar de bestias… ¿tampoco pillamos la diferencia???

Genial Punset y su programa Redes.