
En su breve existencia, ella conocía sólo su pequeño mundo ubicado en aquella oscura habitación y eso era todo su mundo y desde su desconocimiento, tampoco tenía mayor interés en conocer más… Deambulaba con cierta calma entre los estantes, buscando el sustento diario siendo esa ahora su única preocupación
La luz se encendió de improviso y la bombilla de escasa potencia rompió la oscuridad creando una tenue penumbra… ella sabía lo que eso significaba. Corrió rauda a un rincón oscuro y se quedó agazapada, quieta, tratando de pasar inadvertida. Miró con expectación a aquél hombre harto conocido… ella había sido testigo mudo y obligado de cómo él había perseguido a su madre, cómo la había pisoteado, y cómo finalmente, la había matado… sabía por instinto y pese a su reducido tamaño, que era mejor permanecer quieta pasando inadvertida, cómo si no estuviese allí, cómo si aquel hombre, vestido con viejas ropas que se escondían bajo una púrpura clámide que siempre llevaba, no debiese saber de su existencia… Él en realidad sabía que ella estaba allí, aunque no exactamente donde… tampoco le importaba mucho mientras estuviese entretenido manipulando la crátera.
Ella, miraba expectante, agazapada, cómo si formase parte inseparable de aquella húmeda estancia a la que él no prestaba ninguna atención…
Él se detuvo en su tarea y miró a su alrededor, cómo sabedor de que era observado… Ella aguardó presa del miedo… Él continuó un poco más de tiempo con sus quehaceres y tomando alguna pequeña cosa se alejó de nuevo hacia la puerta. La bombilla cubierta de polvo se apagó y un pequeño hilo rojizo era todo cuanto se podía ver desde la oscuridad. Ella, aún expectante y temerosa, aguardó hasta que la oscuridad se hizo tan presente cómo su negro caparazón de cucaracha antes de comenzar a recorrer de nuevo la habitación…
Stonehenge es, en el solsticio de verano (siento no haber podido llegar a tiempo, así que aprovecho el día de San Juan, del mismo simbolismo) uno de los lugares más representativos del cambio de estación ya que el sol sale justo atravesando el eje de la construcción… hoy me tomo la libertad de recordarlo