jueves, 6 de marzo de 2008

Complemento...

Todos necesitamos muchas cosas en nuestra vida... Unas son imprescindibles, otras simplemente accesorias.

Tal vez lo más difícil sea saber discernir cuales son unas y cuales son otras.

En estos días de elecciones, he comentado con varias personas sobre las promesas que los políticos nos hacen intentando conseguir nuestro voto. Es muy posible que ninguno se ajuste a nuestras expectativas en realidad, y tan sólo por aproximación de algunas ideas básicas, o por simple eliminación de otras, podremos escoger (si lo hacemos) nuestro voto y tan sólo algunos fanáticos creerán que todo aquello que afirma el candidato de su elección, es justamente, todo aquello que necesita.

Desde hace tiempo, deseo, sin mucho éxito, extraer la idea de lo necesario y de lo accesorio a toda la realidad de las cosas que nos suceden... Cada vez con mayor frecuencia, las personas necesitamos de más y más cosas... tantas, que, muchas veces, nos sentimos perdidos... y algo tan sencillo como la compañía, se convierte en algo tan deseado como escaso...

No me sorprende que cada vez haya menos gente con tiempo para tener pareja, cuando no tiene tiempo ni para tomar un café con un amigo... No me sorprende que cada vez haya más gente que necesita "algo" en su interior...

No juzgo, si no que reflexiono, que una sociedad cada vez menos enraizada en una fe que le ha condicionado desde la cultura, la educación, el arte, el comportamiento social y tantas otras cosas, todos esos valores se están relegando, mientras que ese hueco, curiosamente, se intenta rellenar con otros... No deseo, por que no puedo, generalizar, pero me resulta muy curioso que antiguos practicantes del catolicismo, ahora se han convertido en practicantes de otras creencias, generalmente orientales, haciendo de esa práctica un elemento ornamental y sintiendo el mismo vacío interior que antes...

Quiero pensar que la principal creencia, está en uno mismo, en tener fe en lo que se es… cimientos indispensables de toda la edificación de la propia vida…

5 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Hanna dijo...

Buen fin de semana.

Nobska dijo...

Seguir una creencia religiosa como un dogma unico en el cual no existe ninguna flexibilidad, va en contra de esa necesaria reflexion acerca de nosotros mismos. Los tiempos han cambiado haciendo enfasis en la adquision material y no en la busqueda interna del ser.

Fue muy grato descubrir tu espacio. Muy interesantes todas tu reflexiones.
Saludos.

Isabel dijo...

Totalmente de acuerdo contigo en la última frase,Pablo.
Si no somos capaces de creer en nosotros mismos,¿ en qué o quién se puede creer?.
¿Se necesita creer en algo más?...

Tal vez, en esa mesa de camilla que siempre tenemos pendiente. ;-)
Un abrazo,amigo;gracias por tus palabras.

Anónimo dijo...

ay la mesa camilla ...sí...

muack