jueves, 11 de junio de 2009

Publicidad

Las pequeñas gotas forman una mágica lluvia… antes y después, tan sólo es agua.

Reconozco que uno se va acostumbrado a la rutina y por lo tanto, no me disgusta ver publicidad en los programas de la TV. No digo que me guste, si no que simplemente, se han convertido en parte del paisaje de la vida de urbanita por la que me he dejado someter… incluso algunos de ellos podrían ser catalogados como pequeñas obras de arte que en unos 20 segundos no sólo nos envían un mensaje para que consumamos tal o cual producto, si no que incluso llegan a convencernos de que es necesario o imprescindible…

La publicidad puede ser un auténtico arte y a pesar de que mucha es aburrida y repetitiva, algunas frases nacidas del mundo publicitario forman ya parte de nuestra vida y del vocabulario general, y es que la rutina machacona de escuchar un mismo mensaje varias veces, puede dar lugar a que nos convenzamos de que su mensaje es cierto… y así, a la hora de comprar el producto, a pesar de que no sepamos nada de nada, aquél que resulte más “oído” por nosotros, será el que más garantía nos ofrezca, sin que ello conlleve que sea el mejor, o simplemente, que en realidad nos haga falta…

Cuando hablamos de publicidad, inmediatamente lo relacionamos con un producto y con su consumo, pero creo que hay otra que de forma suave y dulce, nos va convenciendo de lo que se supone que es la sociedad…

La religión, la política e incluso la misma moral o ética, van cambiando a manos de la publicidad de quienes se empeñan en dar forma a este mundo… Nos dicen lo que está bien y lo que está mal y poco a poco aceptamos y damos como buenos ciertos valores… y mientras, por ejemplo, nos publicitan de una pandemia por el caso de la gripe A con alto riesgo de mortandad en el mundo civilizado (tal vez puedan morir hasta 1.000 personas), no se hace ningún tipo de publicidad para otras enfermedades tropicales que sesgan decenas de miles de vidas anualmente, pero evidentemente, no están aquí…

No hablaré de fe ni de política, donde la publicidad es una realidad más que constante… pero sí hablaré de la publicidad que de nosotros hacemos… y es que nos publicitamos de forma constante… procuramos estar “guapos”, ser “elegantes”, comportarnos “correctamente” y no sé si todo eso nos ha hecho perder algo de nuestra propia esencia de ser personas, seres humanos… y es que, queridos desconocidos, el ser humano siente y piensa, y eso, debe hacerlo por sí solo… hoy debemos vendernos cómo “ecologistas”, cómo “solidarios”, cómo “anti – muchas – cosas” y en definitiva, tengo la sensación de que pese a todos somos distintos, en el fondo, todos somos tan iguales que… cuesta creérselo

Hoy me sorprende la noticia de un hombre que negaba el Holocausto nazi y atentó contra un museo de EE.UU. dedicado a aquella terrible acción… pero… sinceramente… no sé qué pensarán los palestinos… Que no se malinterpreten mis palabras… en ningún caso está justificada la violencia y mucho menos el acabar con vidas o libertades ajenas en pos de ideas propias… pero no sé si la publicidad nos vende algo más que los yogures para ir al baño…


5 comentarios:

PIZARR dijo...

Pues pensabas muy bien y con mucha claridad en voz alta.

A estas alturas no cabe ninguna duda de que efectivamente nos venden cuanto quieren y no precisamente productos que hacen temblar a nuestros bolsillos en más de una ocasión y que encima verdaderamente son superfluos, sino que me refiero a ideologías y formas de vida determinadas.

Unos y otros intentan llevarnos a sus "bandos" y así va el eprsonal dando bandazos de esta a esta otra idea...

Cuando me dedico tiempo a ete tipo de reflexiones como la que hoy nos traes... se me ponen los pelos de punta Buho...

¿ Y que hacer ? si cada uno nos creemos ser distintos y no dejarnos manipular y sin embargo estamos metidos de patitas en el cotarro.

Ahora te contesto a tu pregunta... jajaja... ¿te imaginas a estas alturas de mi vida, con una hija de 19 años, chocolateando en la orilla del mar, de la manera que lo hacía a los 5?... jajaja

Que conste que lo hice también a los 15 y a los 25 e incluso a los 35 ( en playas desiertas claro está... )

Lo mismo este verano me animo de nuevo...

Un beso uho

Luna Azul dijo...

Y es que a poquito que uno escarbe no somos tan distintos. Y no me hables de manipulaciones que una está muy sensible últimamente y a veces me siento como un títere y lo gordo es que no sé quien maneja los hilos, bueno lo intuyo pero no sé muy bien el fin.
Ainsss bueno yo me entiendo lo que digo jajaja.
Un abrazo

Anónimo dijo...

La publicidad es una versión "civilizada" de un lavado de cerebro. Lo mismo que la moda y la política, por supuesto. La religión creo que ha quedado tan obsoleta que ni siquiera se ha subido al tren de la publicidad. Pero creo que si nosotros, individuos, seres pensantes, somos capaces de discernir y de elegir, todavía tenemos una oportunidad. ¿O no?

Unknown dijo...

Es un tema interesante sobre el que existen tantos debates y partidarios.

Desde mi perspectiva.. ... me parece.. promueven un sentido materialista y una concepción hedonista de la vida y nos hace mas gastadores y mas egocéntricos, seamos claros...

.. pero ojo BUHO.. es verdad que los publicista se esconden y justifican , lo mismo que los periodistas en que reflejan la Sociedad, considero que NO ES CIERTO, pero ellos dependen como todos del flujo económico, y ahí interviene el consumidor.. que no es un elemento pasivo.. tiene capacidad para comprar o no... pero lo que no estoy tan seguro es que tenga capacidad para no absorber el mensaje, los mensajes, NO SUBLIMINALES, que la publicidad manda continuamente, de estatus, de nivel, de presumir, de hacer amigos, de estar mas bellos, de ser mejores.. en un sentido de seducción y no real.

En fin me acuerdo todavía cuando aquello de la publicidad subliminal, que ahora ya no se ve como tan influyente con aquellos libros de la “Persuasión oculta de Packard, que han quedado obsoletos.. pues los mensajes son ahora directos.. y el anuncio puede ser soez, burdo, desagradable y vacio.. y si gusta y vende... se mantiene y si no se quita.

En fin... todos estamos implicados en parte en esto de la publicidad y la sociedad somos todos...

Un beso amigo

Ericarol dijo...

Búho
Saber es un arma de doble filo sobre todo cuando basas tus conocimientos en lo que otros te venden, sin saber si es cierto o no. Por eso el papel de los publicistas y periodistas es tan importante para el ser humano pero siempre que se haga con imparcialidad y sin deseos de buscar la gloria, alimentar el ego, crear falsas creencias o causar sensacionalismo solo para vender.
Saludos!