viernes, 13 de abril de 2007

Anochecer


Anochece… por fin parece que llega la hora del descanso y que la calma tomará el relevo de este absurdo ajetreo que nos obliga a movernos sin interrupción ni descanso para hacernos llegar al punto de partida.

La semana ha sido larga, intensa, dura… el fin de semana, para quienes podemos disfrutar de la deseada opción de no tener que ir al trabajo, se convierte en una meta que, paradójicamente, parece cada vez más lejana.

Anochece… sin querer hago balance. Recuerdo, inequívocamente, y siempre por este orden, lo que me quedó pendiente para el lunes… intento organizarlo mentalmente… imposible, demasiado caos… Pienso luego lo que me espera en casa... pienso en la gente que quiero... pienso en las cosas que me gustan... en mis sueños, posibles unos, imposibles la mayoría... Miro al cielo… el tiempo ha estado revuelto y las nubes campan a sus anchas entre su azul infinito que, continuamente, está limpiando el aire del norte…

Anochece… y el sol, también cansado como yo, se retira de igual forma, para descansar, no sin antes regalarnos una última y fugaz visión del mundo… un mundo distinto… un mundo coloreado de forma espontánea pero repetitiva que usualmente llego a apreciar... Un arte sin artista...

Las nubes, perladas o plomizas,casi siempre regordetas y alogodonosas, adquieren un tono anaranjado en la parte superior y juegan mecidas por el viento, a adoptar caprichosas formas que mi imaginación pone nombres de formas conocidas por semejanza… mientras camino a casa, imagino, enfundado en mi música que me aísla del mundo que quiero compartir, las formas que cada una de ella adopta… se juntan, se separan, se estiran, se encojen…

Anochece… no soy capaz de describir lo que veo… tampoco me importa… lo siento, es algo bello, es algo sencillo, es algo cercano, es algo conocido, es algo cómodo… De alguna forma, siento que fuese un maravilloso espectáculo que me regalan y que tengo la oportunidad de disfrutar…

Reduzco el paso... dejo, por un momento, la prisa de lado y disfruto de los colores, de las formas, de lo simple…

Anochece… y de soslayo miro a la gente que está a mi alrededor… como yo mismo hace unos momentos, apresurada, aislada de esa misma sociedad a la que pertenecemos… sonrío… apago la música y me embuto en los sonidos de la ciudad… tráfico y ruidos… y al poco soy capaz de distinguir el sonido del viento, algún que otro ave cantar… de nuevo el tráfico…

Las nubes siguen, ajenas a todo, con su particular danza con el viento, los colores, y el cielo... El sol, apoyado en el horizonte, pinta todo cuanto alcanza de anaranjados, y se apoya de forma descontrolada sobre ellas, creando un cuadro único del que muy pocos son testigos…

Anochece… busco el descanso en la noche… enfundado de mis recuerdos al aroma del anochecer…

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuando he estado trabajando todo el día, un buen anochecer sale a recibirme.

Isabel dijo...

Wow,Pablo...,qué lujo...
Me encantaría que pudieras ser capaz de desconectar del mundanal ruido ,así como has hecho hoy,pero a diario,en cada momento que,por suerte,te permitas...
¿Ves? Uno siempre acaba aprendiendo antes o después lo que merece la pena y lo que no...
Un fuerte beso,te lo mereces..;-)
Disfruta de ese fin de semana tan deseado,amigo. :-)

Candelas Sanchez Hormigos dijo...

Me ha gustado ese retorno a casa, ese cielo, esa tarde.

Me ha gustado caminar contigo y ver y mirar las mismas cosas y por un momento, solo por un memento te he visto parado, allí, en la mitad de la acera contemplado tu mundo interior,

Un beso

Hanna dijo...

Me ha gustado imenso, feliz fin de semana y divertete.

Anónimo dijo...

Que descanses....

Perovsquita dijo...

estoy deseando que llegue esta noche, para ver ese anochecer. Lástima que hoy... ya sea lunes.